Los cánones e ideales de belleza existen desde que el mundo es mundo. Preocupados por las proporciones y el equilibrio, los egipcios y griegos ya dan los primeros pasos en esta materia. Más de 2000 años después, muchas cosas han cambiado pero la imagen femenina sigue cuestionándose día tras día. Hoy os hablamos sobre una de las preocupaciones estéticas más frecuentes entre las mujeres y os damos las claves para que no se convierta en una verdadera obsesión. ¡Sigue leyendo!
BELLEZA Y ESTÉTICA
Revistas, certámenes, redes sociales, 'it girls', programas de televisión, miremos hacia donde miremos la belleza está presente. El problema se genera cuando creemos que la perfección existe, es real y se puede conseguir. Nada más lejos de la realidad. La belleza está más en el interior de lo que puedes imaginar y aceptarse y quererse es el primer paso para ser feliz, la principal fuente de belleza.
Es curioso cómo esta cuestión afecta, fundamentalmente, al género femenino que se ha sometido y somete a la presión y sacrificios que implica alcanzar la perfección estética. El por qué o el por qué no, debería exigir una revisión por parte de cada sector que conforma la sociedad porque recordemos que, según la Sociedad Española de Medicina Estética, se estima que alrededor de un 10% de los pacientes que solicita una intervención estética aún no ha cumplido los 18 años. Preocupante, ¿verdad?
EL PROBLEMA
Abordar este problema suele comenzar cuando empezamos a ser conscientes de pequeñas señales que progresivamente van a más, hasta que la belleza se convierte en una obsesión y para conseguirla cualquier medio es válido. La inseguridad, miedo y falta de autoestima son tres de los indicios más preocupantes.
En este punto, nos centramos en una de las consultas estéticas más requeridas y más frecuentes, el tamaño del pecho. Por exceso o por defecto, muchas mujeres se sienten acomplejadas y solo ven la salida en la cirugía. ¿Sabes que hay cientos de alternativas? ¡Descúbrelas!
SOLUCIONES
Ponerle fin a una situación de este tipo conlleva una terapia psicológica. “Resulta destacable que la mayoría de las personas que sufren esta situación son consideradas por los demás como guapas y atractivas. Éste es el cambio que debemos provocar, ya que sin este cambio podemos entrar en un problema que se convierte en patológico y que lleva a un trastorno mental”, señala el doctor López Vallejo.
Enumerar la cantidad de prendas adecuadas que hay en el mercado para tratar el problema o las soluciones, trucos y consejos de los expertos de belleza, puede ser la forma de abrirle los ojos al paciente. Además, una detallada explicación de los riesgos que supone someterse a una intervención quirúrgica y los efectos secundarios que conlleva, son motivos de peso para disuadir pensamientos equívocos y peligrosos.
CONSEJOS Y TRUCOS
Un pecho bonito no depende solo del tamaño. Hidratar la piel del escote y de los senos es esencial para lucir el mejor aspecto de esta zona de nuestro cuerpo. Como hemos incidido en puntos anteriores, algunos detalles pueden marcar la diferencia y será esencial elegir prendas que te favorezcan y disimulen aquellos defectos que te preocupan. Escoger el escote adecuado, utilizar el sujetador apropiado o el tejido perfecto son claves.
Pechos pequeños
La sensación de volumen puede darse si utilizas:
- Escotes en V, palabra de honor, halter, cuadrado y corazón.
- Sujetador push up o con relleno.
Pechos grandes
Disimular el tamaño del pecho requiere:
- Evitar prendas pegadas y cinturas muy definidas.
- Usar un sujetador reductor.
- Optar por escotes cuadrados.
Si no logras eliminar el problema y sigues queriéndote ver de otra manera, recuerda que siempre puedes acudir a la cirugía, pero no olvides confiar tu salud a profesionales del sector.