“Nadie puede ejercer la inhibición cognitiva, la fuerza de voluntad, a través de una unidad bioquímica que ocurre en cada minuto, de cada día, de cada año.” – Dr. Robert H. Lustig
Si alguna vez has tratado de reducir el consumo de azúcar, se habra dado cuenta de lo increíblemente difícil que es. En algunos casos puede parecer francamente imposible.
Parece claro que cuando se trata de alimentos como el azúcar y otros alimentos chatarra, algo en el cerebro no funciona como se supone que debería ser.
El sistema en nuestro cerebro que se supone que regula la ingesta de alimentos y nos impiden la obtención de un mal funcionamiento de peso.. La pregunta es: ¿Por qué?
Para entender por qué sucede esto, el Dr. Robert H. Lustig, endocrinólogo pediátrico y el Dra. Elissa S. Epel, psicólogo, explican en el vídeo de arriba cómo el azúcar y otros alimentos chatarra pueden “secuestrar” la química del cerebro para querer más y más.
La Sobreestimulación de los Centros de Recompensa del Cerebro Causan Adicción
El azúcar es la única engordante, debido principalmente a su alto contenido de fructosa.
Hay varias maneras de que el azúcar nos hace comer en exceso y aumentar de peso sobre el cual voy a estar cubriendo todas ellas en las próximas semanas.
Hoy voy a hablar de uno de estos mecanismos, los poderosos impactos que el azúcar tiene en los centros de recompensa del cerebro.
Cuando comemos alimentos que contienen una gran cantidad de azúcar, una cantidad masiva de dopamina se libera en una área del cerebro llamada el Núcleo Accumbens.
Cuando comemos estos alimentos con frecuencia y en grandes cantidades, los receptores de dopamina comienzan a regular a la baja. Ahora hay menos receptores para la dopamina.
Esto significa que la próxima vez que come estos alimentos, su efecto es mitigado. Vamos a necesitar más comida chatarra la próxima vez que comamos con el fin de obtener el mismo nivel de recompensa.
Azúcar y otros alimentos chatarra, debido a su poderoso efecto sobre los centros de recompensa del cerebro, funcionan de forma similar a las drogas de abuso como la cocaína y la nicotina.
Los mismos centros cerebrales exactas están en juego. Las personas que tienen una cierta predisposición a la adicción se vuelven adictos a estos alimentos y pierden el control de su consumo.
Se trata básicamente de cómo el azúcar y otros alimentos chatarra “secuestran” la química del cerebro que nos hace desear más y comer más.
El Azúcar Tiene una Poderosa Influencia Sobre Nuestro Comportamiento
Para algunas personas habrá cambios anatómicos en el cerebro cuando se expone a este tipo de alimentos. En muchos casos, esto puede terminar en adicción completa.
Puedo apoyar esta idea con algunas experiencias personales.
Soy un adicto a las drogas en recuperación que ha estado en 6 centros de rehabilitación. Yo también era un fumador desde hace muchos años y era una larga batalla para que renuncie. Se podría decir que conozco la adicción como la palma de mi mano.
Estoy aquí para decirles que la adicción al azúcar y alimentos chatarra es exactamente la misma que la adicción a drogas de abuso como la nicotina, anfetaminas y cannabis.
No hay ninguna diferencia, excepto la sustancia de abuso es diferente y las consecuencias de la recaída no son tan graves.
Dado que aprendí acerca de esto, he hablado con varios otros adictos en recuperación y todos dicen que experimentan antojos de comida chatarra de la misma manera exacta como solían desear drogas y el alcohol.
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