10 ACTITUDES QUE DELATAN LA DEPENDENCIA EMOCIONAL EN LA PAREJA

En cierta medida, todos los seres humanos somos dependientes de nuestro entorno. Este es un hecho que debemos aceptar, en gran medida porque nos enriquece.

Sin embargo, la dependencia emocional en la pareja se describe como una patología en la cual las dinámicas del núcleo sentimental se encuentran subordinadas a la otra persona hasta el punto de que la persona que la sufre padece una falta de autonomía casi total.

Ante esto, ¿Cuáles son las actitudes con las que debemos estar atentos?

Estas son las 10 actitudes que delatan la dependencia emocional dentro del núcleo de la pareja

1. Miedo a la soledad

La raíz de toda dependencia emocional siempre se sustenta en ese miedo común a la especie humana de quedarse solo, de sentir la soledad. Sin embargo, cuando se intenta pasar el máximo tiempo posible con otros puede que existan otras causas (como no querer pensar en los problemas propios o sentirse incapaz de cambiarlos).

2. Baja autoestima

A menudo, cuando buscamos aprobación estamos diciendo a voces que no tenemos la suficiente confianza como para responsabilizarnos de nuestras decisiones.

3. Culpabilidad

 Las personas que tienen un sentimiento de culpa excesivamente arraigado suelen caer en este tipo de comportamientos.

4. Complejos

Esta actitud de dependencia emocional la podemos añadir a la baja autoestima aunque, generalmente, puede dar lugar a una persona dependiente por sí misma, sobre todo cuando ese complejo físico llega a afectar a la autovaloración.

5. Negación

Aquellos individuos que tienden a “vivir en una burbuja” por miedo a sentir pena, tristeza, rabia, odio u otras emociones negativas (pero inherentes al ser humano) corren el riesgo de entrar en relaciones que idealicen hasta un extremo, negando los potenciales problemas o incompatibilidades que existan en la relación.

6. Normalizar el maltrato físico y/o psicológico

Es bastante común que un maltratador físico y/o psicológico forme relación con una persona dependiente ya que, mientras que uno anhela controlar al otro en todo, el dependiente espera la aprobación constante y la “guía” de otra persona.

7. Comportamiento excesivo con respecto a la pareja

Cuando se llama a todas horas a la pareja cuando está fuera y se trata de pasar todo el tiempo puede que estemos ante dos situaciones; la limerencia inicial que es bien recibida (nuestras hormonas nos piden estar a todas horas con el otro. Es química) o la dependencia emocional (si al cabo de unos meses de iniciar la relación no se está buscando el espacio propio es muy probable que se padezca algún tipo de desajuste en este sentido).

8. Trastornos alimenticios

En muchos casos, la falta de control que las personas dependientes experimentan con respecto a las decisiones más importantes de sus vidas, suelen ser compensadas por trastornos con respecto a eso que es imprescindible para la vida; la alimentación.

9. Mostrar sumisión hacia la pareja

Hay una frase maravillosa en la novela “Las ventajas de ser un marginado” que dice que “aceptamos el amor que creemos que nos merecemos” y, en cierto modo, la sumisión es un síntoma de dependencia emocional justamente porque no marcamos los límites que debemos a la hora de establecer una relación sana (aún a riesgo de que la otra persona no acepte alguno de nuestros límites y la relación se termine).

10. Insatisfacción individual

En ocasiones, la dependencia emocional viene porque el individuo no se siente feliz en su cuerpo ni satisfecho con su vida por lo que ven al otro como “lo único que tienen”. El hecho de valorar la relación de pareja por delante de todo lo demás suele ser común en personas que vinculan el éxito en una relación con un estatus social más alto.

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Autora :Álex Bayorti(colaboradora de nuestro blog)

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