¿Cómo fortalecer el cuello?
Ejercicio de la lengua:
Uno de los mejores ejercicios que podemos hacer para fortalecer el cuello consiste en sentarnos en una silla, con la espalda recta y mirando hacia el techo con el cuello completamente estirado. Presionamos la lengua contra el paladar mientras continuamos en esta posición y notaremos que se tensa la parte delantera de esta zona. Será bueno repetir esto al menos 14 veces al día, si ves que te cansa mucho puedes hacerlo en dos sesiones, por ejemplo 7 por la mañana y 7 por la tarde.El ejercicio de contraer:
En este ejercicio solo tenemos que cerrar la boca fuerte y contraer los músculos de la zona de la papada. Como ves es muy sencillito y al igual que el de arriba puedes hacerlo en una sola sesión de 14 o bien hacer 7 por la mañana y 7 por la tarde.Inclinaciones laterales:
Como podrás imaginar por su nombre simplemente tenemos que ir moviendo la cabeza desde un lateral hasta el otro, ten cuidado a la hora de realizarlo no hagas movimientos bruscos y haz varias sesiones al día para fortalecer el cuello.Subir y bajar hombros:
Con este ejercicio fortalecemos los trapecios y a la vez trabajamos tanto el cuello como la espalda. Nos tenemos que colocar de pie, con los hombros relajados, “tira” de ellos hacia arriba y mantenemos la postura todo el tiempo que podamos. Después hacemos el mismo movimiento a la inversa, es decir, descendemos al máximo y aguantamos unos segundos.A la hora de comer:
Ten en cuenta que una buena dieta siempre es importante para todo nuestro cuerpo, debes de evitar la comida basura, el alcohol, los refrescos azucarados y el tabaco. Si evitas estas cosas te darás cuenta de que se empieza a perder una pequeña grasa que tenemos en la barbilla y con ello la acumulación de peso para nuestro cuerpo. Es un pequeño cambio que nos puede venir muy bien y además si sigues una buena alimentación podrás lucir cuerpazo y mantenerte totalmente sano. Es decir, no solo te viene bien para esta zona del cuerpo sin para mejorar nuestra salud en general.
Por último, recuerda que lo más importante de todo es que el cuello no nos duela, por ello evita tener malas posturas, tanto cuando estés sentando como andando. Al principio tener una postura correcta nos puede resultar complicado si no estamos acostumbrados a ello, pero con un poco de disciplina verás cómo en poco tiempo lo consigues y de esta manera nuestro cuello nos lo agradecerá.
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