Esto apenas está comenzando.
A mí no me molesta el encierro pero tampoco lo veo como la gran oportunidad de agradecimiento, es un encierro forzoso y todo lo obligado cae gordo, es como cuando tu mamá te mandaba a levantar los juguetes y tu ropa sucia, no te encantaba pero había que hacerlo.
Lo que sí veo es una oportunidad de valorar lo que sí tengo, no lo que me puedo estar perdiendo.
Les voy a hacer una lista:
Valoro el poder cocinar cosas nuevas, si, siempre estoy corriendo y caigo en las mismas cuatro recetas rápidas, hoy cocino con mi hija y matamos dos pájaros de un tiro, ella aprende a ser más independiente con algo que va más allá de una quesadilla y sándwiches y yo disfruto estar más tiempo de calidad con ella, claro que al terminar la pierdo en sus conferencias por la compu o el teléfono con sus amigas, no importa, al rato haremos la cena, veremos la tele o me colare por su cuarto para escuchar música, amo compartir su espacio y me cuente todo lo,que ocurre en su vida, sin prisas de gimnasio, escuela, reuniones, así, sin planes más que estar conmigo por la contingencia.
Antes me quejaba cuando mi hijo era más chico que se la pasaba en el Xbox o haciendo tarea, hoy por la situación ha retomado el juego y hoy lo disfruto muchísimo, volver a escucharlo reír en su cuarto conectado con sus amigos de la infancia o tomar clase en línea en su cuarto, es algo que ya no existiría, entre la universidad, las clases particulares que da o irse a comer con sus amigos, la verdad es que casi no lo veo, así que me encanta poder verlo y compartir con él los alimentos, una serie, una película o una plática, siempre tiene un tema para conversar y me encanta estar con él y escucharlo, así que me siento afortunada con estos días de encierro.
Esto se escucha como si mis hijos no compartieran tiempo en familia, si, claro que lo hacen pero cada día las actividades propias de su edad, reducen los momentos, hoy son míos y solo míos y saben que? Me encanta!
Hace mucho tiempo no salgo al jardín, tengo el privilegio de tener uno al que no le había hecho gran caso desde que los niños dejaron de salir a jugar, hoy salgo y lo riego, han salido flores que alguna vez plante y ya no las recordaba , no es que lo haya abandonado, pero simplemente ya no salía, hoy me encanta estar ahí y leer mi libro, puedo esperar mucho tiempo junto a mi perrita que si lo disfruta hasta que se cansa y se mete con mis hijos, he redescubierto una parte importante de mi hogar que había olvidado que me trae paz.
Tengo tiempo para mí, para meditar, para decidir si ando en ropa cómoda o me arreglo un poco más, confieso que ando muy cómoda, no me quito los tenis por nada del mundo y mi espalda lo agradece muchísimo, las migrañas han bajado de forma considerable y la fibromialgia me ha dado un poco de tregua, eso es algo que agradezco de forma infinita.
Tengo tres series que pienso terminar con una buena taza de té y algunas galletas de chispas de chocolate, bienvenido el que las quiera ver conmigo, también podría ser que en lugar de te fuera agua de limón y nuca más con miguelito, mmmm!
He regresado a meditar, un poco cada día, he redescubierto la facilidad con la que esto se me da, me ayuda a estar en mi centro, no dejo que nadie me moleste ni me quiten la paz, a todas esas personas que tratan de molestar (siempre hay alguien amargado) los dejo que sigan envenenándose, realmente a mí no me importa nada que no esté bajo este techo o dentro de mi corazón.
Estoy terminando un libro y tengo tres más en la espera y muero por comenzarlos a la voz de ya.
También limpio mi casa, no se crean que todo es color de rosa y felicidad, jajajaja, pero me gusta, obvio hay cosas que no puedo hacer pero mis hijos las hacen, todo va bien y todo va a estar bien, no salimos ni saldremos, no hay que angustiarse, estamos a salvo en casa y hasta hoy todo está bajo control.
Tal vez mañana buscaré un curso de pintura en you tube, ya encontré clases de zumba y son buenísimas, hay que aprovechar la tecnología, hoy está de nuestro lado, en mi infancia no había más que aburrirte o improvisar, hoy hay mil opciones o puedes renegar de todo y de todos.
A los 40 una vez más estoy confinada una vez más en mi casa, las veces que he pasado más tiempo fueron dos ocasiones por siete meses cada una, fueron mis embarazos y ahí si no podía ni levantarme de la cama, así que este encierro no me asusta, estar con mis hijos me entusiasma, hoy la vida me regala tiempo para vivirla de una forma calmada y hasta puedo decir que privilegiada, así que agradezco lo que tengo, a quienes tengo, agradezco que estoy de pie, viva, con infinitas posibilidades de poder hacer mil cosas, no hay nada afuera que sea mejor que lo tengo dentro de mi hogar, mi familia que está afuera, siguen bien, están sanos y en constante comunicación así que considero que están dentro, todo fluye, todo permanece, lo que se tenga que ir se irá con este virus también, todo es tiempo, el que se necesite para que cuando salgamos de aquí, seamos otros, siendo mejores seres humanos, con un mejor corazón, más piadoso, más agradecido, más en el presente y estando más presentes.
Gracias por tu valioso tiempo.