Siempre que buscamos esa felicidad tan deseada, y nos encontramos alguna dificultad en el camino, nos preguntamos qué podemos hacer para solucionarla, con el menor impacto posible, y con la mayor eficacia.
Muchas personas tiene la falsa concepción que el acompañamiento psicológico se realiza en caso de gran sufrimiento o de patologías severas, pero no es así exactamente.
Hay diferentes especialidades y, por supuesto, una de ellas está relacionada con el manejo de trastornos mentales.
La psicología del bienestar, tal y como yo la entiendo, va un poquito más allá. Supone un acompañamiento terapéutico enfocado en la excelencia, en aquello que las personas quieren conseguir alcanzar pero solas no pueden.
Al finalizar un proceso terapéutico, hay personas que quieren seguir evolucionando, yo lo llamo pulir su diamante, porque el diamante ya lo han encontrado, se sienten satisfechos y en equilibrio, pero les queda afinar, pulir, definir algunas cosas para ofrecer su mejor versión al mundo.
Para mi, este acompañamiento es muy especial, ya que partes del bienestar para seguir creando bienestar.
Como pautas generales te sugiero:
Busca motivaciones en tu vida.
Trabaja tu mente emocional con ejercicios específicos.
Dedica un ratito de tu tiempo a escribir cómo fue tu día.
No pospongas tareas que no te gustan, generan carga emocional.
Decide transformar lo bueno en lo mejor.
Y si no puedes hacerlo solo, piensa que siempre puedes contactar con un psicólogo para que te ayude en el proceso.
¡Feliz día!