Fundamentalmente los beneficios del mindfulness son que ayuda a controlar y a relacionarse mejor con el estrés y la ansiedad, mejora la calidad del descanso y la concentración, ayuda en las relaciones interpersonales y favorece la creatividad y la memoria. Fundamentalmente, y a medida que vas introduciéndolo en tu vida, te va haciendo una persona más libre, pues vas a tomar decisiones y realizar acciones más conscientes y menos reactivas.
No es la panacea ni una varita mágica que va a cambiar tu vida de la noche a la mañana. Es como un proceso de compromiso con la vida y contigo mismo. No es que cambie lo que vives, sino que cambia tu manera de relacionarte con ello y esa es la clave.
No es lo que me pasa sino cómo me relaciono con lo que me pasa.
Artículo en Diario de Ibiza.
Mucho más que un remedio anti-estrés
La práctica de mindfulness propone una amorosa alternativa a la desconfianza crónica que hoy nos domina.
Nos resulta difícil bajar la guardia y vivir el presente; admitir que no es posible controlar el futuro. Esta incertidumbre nos provoca tanto miedo que vivimos física y mentalmente agotados, desconectados del cuerpo y del fluir natural de la vida. Pero es posible existir de otra manera. La práctica de mindfulness propone una amorosa alternativa a la desconfianza crónica que hoy nos domina: el regreso a una inocencia que abraza cada instante como algo nuevo e irrepetible.
El momento zen que mejora el rendimiento
Las técnicas de relajación llegan a la empresa como vía para reducir el estrés y aumentar la productividad. Y no son solo una moda.