La importancia del descanso en el estado físico

Muchas veces, las personas consideran que haciendo ejercicio se obtiene un cuerpo sano y en buen estado. Si bien es cierto que el ejercicio y la actividad física regular es un elemento fundamental para el bienestar físico, también lo es el descanso y la reposición de energía. Por eso, obtener un buen descanso, con un colchón cómodo y el tiempo necesario para recuperar la energía, debe formar parte de nuestra rutina de entrenamiento.



En este post hablaremos acerca de los beneficios de un buen descanso y de cómo evitar lesiones y dolores de espalda a partir de una acción tan importante como la de elegir el mejor colchón. No solamente tienes que establecer una rutina de ejercicios y una práctica deportiva regular, también hay que saber cuándo descansar y relajarse.

Características para elegir un buen colchón

La resistencia que ofrece la superficie sobre la que dormimos, es el primer punto a considerar cuando elegimos un colchón. Cada persona tiene un nivel de resistencia y percepción de la presión diferentes, por eso hay diferentes tipos de colchones pensados para cada tipo de cuerpo. En la elección de colchón, lo que necesitas tener en cuenta es que no debe ser ni muy duro, ni muy blando. Debe ser firme para que nuestro cuerpo esté sostenido, pero no incómodo. No tiene que tener huecos ni deformaciones, manteniendo una estructura homogénea que reparta adecuadamente el peso, y por último tiene que ser adaptable. Esto implica que seguirá la curvatura natural de la columna y se amoldará a nuestro cuerpo.

¿Qué tipos de colchón existen?

El colchón de espuma: existen distintos materiales que forman parte de esta categoría. El poliuretano es el material más utilizado, y tiene como principal característica la posibilidad de cortarse para adaptarlo a todos los tipos de cuerpo. Tienen un precio más bajo que el resto. Como punto negativo, no regular la temperatura.

Los colchones de muelle: estos colchones no presentan problemas de humedad y traspiran mejor. Son especialmente indicados para personas que sufren de sudoración nocturna. Según la forma de los muelles, encontramos tres estilos distintos: muelle continuo, muelles independientes o muelles embolsados.

Los colchones de látex: tienen una mejor adaptación al cuerpo que los colchones de muelle. Ofrecen una mayor firmeza y tienen mucha flexibilidad. Otra ventaja es que aíslan el calor. Encontramos variantes de: látex sintéticos, mezcla o látex natural.

¿Qué considerar para elegir un colchón para nosotros mismos?

Primero tenemos que considerar como dormimos. ¿Solos o acompañados? Existen colchones que, por sus materiales, ayudan a realizar movimientos independientes con mayor comodidad. Luego seguimos con el tamaño del colchón, los pies nunca tienen que quedar por fuera. También consideramos el peso, ya que mientras más pesamos, más firmeza se requiere. En personas delgadas, la clave está en mayor flexibilidad para que el colchón reparta mejor nuestro peso corporal.

Tu postura al dormir también influye al elegir un colchón. Si duermes con el cuerpo extendido, los colchones más duros son mejores. En cambio, las posiciones fetales o de tronco requieren colchones más flexibles para no dañar el hombro.

Estos son algunos de los consejos pensados para considerar a la hora de elegir colchones. Si los sigues, podrás conseguir el mejor rendimiento y descanso para tu cuerpo.