Tenemos como costumbre dedicarnos a descuidar nuestra dieta durante un tiempo permitiéndonos coger unos kilos de más que luego queremos perder de forma rápida y sin esfuerzo y yo os pregunto: ¿Es eso razonable? ¿Es una buena táctica? ¿Eres consciente de que pones en peligro tu salud?
El peligro de las “dietas milagro”
Ese modus operandi únicamente te lleva al desagradable efecto rebote y a la frustración por volver a recuperar rápidamente el peso que con tanto esfuerzo has perdido anteriormente.
Algunos consejos que debes tener en cuenta:
No te hagas fans de las muchas dietas milagro que cada temporada te asedian en medios de comunicación y en revistas femeninas. Con este tipo dedietas el organismo pierde mucha masa muscular, gran cantidad de agua y muy poca grasa, que, en definitiva, es nuestro objetivo principal.
La masa muscular consume más energía que la masa grasa; por lo tanto, no solo nuestro cuerpo quedará más flácido, sino que seremos más vulnerables a engordar de nuevo. Debido a la pérdida de agua, nuestra piel se verá apagada y acudirán las arrugas más fácilmente, sobre todo si hemos superado ya la treintena.
No elimines de tu dieta nutrientes importantes. Casi todas las dietas rápidas están basadas en la eliminación de alimentos imprescindibles para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Unas prescinden de los hidratos de carbono, otras de las grasas, y ambos son alimentos necesarios para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo.
Caer en la tentación. Cada vez que tenemos el propósito de empezar una dieta de adelgazamiento parece que a nuestros amigos les da por invitarnos a comer con más frecuencia, y a pesar que le habéis comunicado vuestra determinación, ellos insisten e insisten en poner delante de vosotros todo aquello que deseáis y que sabéis que no se debe tomar. Y yo os digo, sed fuertes y no caigáis en la tentación. Si la primera vez no caéis en su trampa les dejaréis muy claro que esta vez va en serio y que deben respetar vuestro deseo de perder peso.
No respetar los horarios de las comidas. Puede parecer algo superfluo, pero no lo es. Nuestro cuerpo está preparado para recibir alimentos cada 3 o 4 horas como máximo y cuando no es así, se ponen en marcha mecanismos de protección de los órganos vitales como corazón e hígado. De forma que nos saltamos una comida porque pensamos que adelgazaremos más y podemos tener totalmente el efecto contrario ya que nuestro metabolismo entra en modo reserva, gasta menos energía y guarda más, ya que tiene el concepto de que le han faltado nutrientes en la comida anterior.
Si estás de dieta es muy importante no saltarse las comidas
Además, el saltarse una ingesta hace que llegues a la siguiente comida con más hambre, por lo que ingerirás, seguramente, más calorías de las necesarias y posiblemente en el camino hayas caído en la tentación de picar algún snack dulce o salado lleno de calorías vacías.
El sedentarismo. Aunque la dieta es un pilar importante en la pérdida de peso, está más que comprobado que no es el único. El ejercicio físico es otro pilar fundamental para perder peso y para poder mantener esa pérdida a largo plazo y evitar el efecto rebote. En la actualidad tanto en el trabajo como en los ratos de ocio, cada vez más, nos sentamos en una silla o el sofá. Hemos de concienciarnos que es imprescindible dedicar una hora todos los días a la realización de alguna actividad, a ser posible al aire libre: andar, montar en bici, nadar, patinar, etcétera. Nuestras ciudades cada vez están más acondicionadas para la realización de este tipo de actividades. El deporte no solamente es beneficioso para perder peso, también aportará relajación y tranquilidad a tu mente.
No beber agua. El agua es la otra columna necesaria para perder peso de una forma sana. El agua mejora nuestras digestiones y nos ayuda a eliminar toxinas y grasa. Y cuando decimos agua, decimos agua o infusiones (sin azúcar, por supuesto); un café no es agua, un zumo no es agua. Los expertos aconsejan beber 8 vasos de agua todos los días, no solamente te ayudará en tu pérdida de peso, sino que también mantendrá tu piel bonita e hidratada.
Es recomendable beber 8 vasos de agua al día
No dormir lo suficiente. El descanso nocturno es importante para mantener un equilibrio emocional y físico, durante la noche nuestro metabolismo repara, regenera y elimina las toxinas acumuladas durante el día. Es recomendable dormir 8 horas todos los días.
No utilizar laxantes. Es muy común recurrir a los laxantes para eliminar los excesos de nuestra dieta, esto no es sólo una práctica inútil para perder peso, ya que en realidad sólo ayudan a eliminar agua de nuestro organismo, destruyendo al mismo tiempo la flora intestinal, tan necesaria para la absorción y eliminación de grasa de nuestro cuerpo. Utilizar laxantes como método de adelgazamiento es muy perjudicial para la salud. Espero que os hayan resultado útiles estos consejos para evitar el tan desagradable efecto rebote. Que tengáis una muy buena semana