Estos días de vacaciones voy a hacer mías las palabras de Henry David Thoreau en su maravilloso libro "Walden": "Pasemos un día de forma deliberada, como lo hace la naturaleza, sin permitir que una cáscara de nuez o el ala de un mosquito nos hagan descarrilar. Levantémonos temprano, ayunemos o desayunemos, de forma agradable y tranquila; dejemos que la compañía venga y vaya, que las campanas tañan, que los niños alboroten, y sigamos determinados a hacer de todo esto un día. ¿Porqué habriamos de someternos y seguir la corriente? Sortead este peligro y estaréis a salvo, porque el resto del día es cuesta abajo. "
Para que vamos a pedir nada más. Después de todo el ruido, las interferencias que nos impiden oír y ver con claridad, necesito no pensar, encontrarme, reconectar y vivir.
Así que caminaré, haré deporte, me bañaré en el mar cuando la playa esté vacia, haré yoga sobre la arena, leere muchos libros y guardaré muchos silencios. Todavía no entiendo porque está sobrevalorado el estar siempre ocupado y preocupado, y el estar siempre hablando sin descanso. El silencio y el no hacer nada es muy reconfortante.
No me olvidaré de sonreír y reír, y de disfrutar en compañía de quien más quiero.
Y para irse de vacaciones no hace falta recorrer muchos kilómetros, yo estaré muy cerca pero me sentiré muy lejos.
Os dejo con unas fotografías que me enamoran y que espero os gusten también a vosotros, a mí me resultan fascinantes y muy relajantes.
NOS VEMOS EN SEPTIEMBRE ¡¡¡
FELICES VACACIONES¡¡¡
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