Hora 25

Eran casi las cuatro de la tarde cuando me llamaron de GEPAC.

- Estefanía, nos han llamado de la CADENA SER para intervenir en el programa HORA 25, con Angels Barceló. Te vienes??

No lo dije, pero para mis adentros sonó aquella cancioncilla: No me toques las palmas que me conozco.

- Por supuesto!!

- Ok. Te llamará la redactora para hacerte unas preguntitas, y te ponen transporte.

Ole y ole. Cada vez me gusta más participar en los medios de comunicación. Ayer ni me puse nerviosa. Fue como tomar un café con amigas. Fluido, cómodo, fácil.

Antes de seguir, os dejo el enlace al audio, por si no tuvisteis la oportunidad de escucharlo

Lo que viene después del cáncer

La Ser está situada en la Gran Vía, que un jueves noche es digna de admirar. Madrid nunca duerme, y Gran Vía muchísimo menos. Días como el de ayer me reconcilian con la capital, con su bullicio y su vivir cosmopolita.

Gran Vía

Tras pasar el control de seguridad, con pitada incluída, claro (viene de lejos, pero siempre pito en los arcos detectores), octava planta y el reencuentro con dos mujeres a las que admiro y me encanta ver: Fátima Castaño, psicooncóloga de Gepac, y Ana Vallejo, del área de comunicación.

Salió a buscarnos Sara Vítores, redactora del programa, con la que hablé previamente en casa por teléfono para saber lo que nos traíamos entre manos, radiofónicamente hablando.

Los pasillos de la radio me encantaron. “Peceras” llenas de controles, técnicos, redactores… Pasamos por el set de El Larguero, guardián de mis sueños todas las noches en mi cama de Talavera, rutina heredada de mi papi.

Sara nos ofreció visitar la terraza, lo que agradecimos. El buen tiempo nos dejó ver los tejados del Madrid nocturno, y templamos nervios intentando adivinar qué edificios rompían el horizonte. Allí se incorporaron Pilar Cairó, de la Fundación Stampa, y Vivi Lizana, compañera de experiencias.

Cuando nos abrieron la puerta del estudio, no podía para de mirar embobada todo lo que había, guardando en la retina cada detalle.

Foto "robada" a Ana
Foto “robada” a Ana Vallejo

Angels Barceló nos situó a cada una, con un halo de profesionalidad impactante. Cuando empezó a hablar, no podía parar de mirarla embelesada. Qué voz!!

Ángels Barceló, Estefanía, Vivi, Fátima y Pilar

Comenzó nuestra intervención. Fue tan fácil que todavía hoy me parece increíble. En mi otra vida fui locutora, no encuentro mejor explicación. Hubo momentos tan relajados como éstos para hacer fotos

Vivi, los cascos y yo ;-)
Vivi, los cascos y yo ;-)

Vivi, Fátima, sus cascos y Pilar
Vivi, Fátima, sus cascos y Pilar

Y, como no voy a ser yo menos que Ellen Degeneres, tengo mi propio selfie, al que sólo le faltan los actores de atrás

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Igualita, no? ;-)

Os dejo ya, sonrojada por cada piropo, inflada por tanto halago, y orgullosa de saber que en el sofá de nubes, el abuelo Ñoñi estaría hoy presumiendo como nadie de su pequeña.

Os leo!!

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