La Operación de Tibia y Peroné es frecuente ante traumatismos directos y politraumatismos que ocasionan fractura de estas estructuras Oseas. La Fractura de Diáfisis Tibia y Peroné es la más frecuente de todas las fracturas del esqueleto, por lo cual el día de hoy te informaremos las principales características de este tipo de lesiones y sus tratamientos.
Características Anatómicas de los Huesos de la Pierna
La Pierna está conformada por dos huesos la tibia y el peroné. Para comprender mejor cuales son las fracturas que ameritan operación de tibia y peroné se realizara un breve recuento anatómico de estas estructuras.
La Tibia
Es de menor longitud que el peroné, superiormente se articula con el fémur y en su porción inferior con el talo. Además se articula lateralmente con el peroné en sus dos extremos motivo por el cual están muy relacionadas las fracturas de ambos huesos. La tibia está conformada de la siguiente manera:
Epífisis proximal (extremo proximal): formada por dos cóndilos uno lateral y otro medial. En la cara superior de los cóndilos tibiales están las superficies articulares para los cóndilos femorales esta superficie articular recibe el nombre de Meseta Tibial, frecuente sitio de fracturas.
Diáfisis (Cuerpo de la Tibia): tiene forma de prisma triangular con tres caras y tres bordes. El margen anterior es agudo, se origina en la tuberosidad tibial y forma la espinilla, separa las caras lateral y medial de la tibia.
Epífisis distal o inferior (extremo inferior): es más pequeño que la proximal, con una prolongación medial que recibe el nombre de maléolo medial o tibial. La cara inferior una cara articular para el talo.
El Peroné o Fíbula
Es un hueso largo que se ubica postero lateral en la pierna. Compuesto por dos epífisis y una diáfisis, con las siguientes características:
Epífisis proximal: el extremo proximal del peroné se une con el cóndilo lateral de la tibia, esta porción del peroné recibe el nombre de cabeza fibular y presenta una faceta articular y una pequeña protuberancia de la cabeza denominada ápice.
Diáfisis del peroné: Es en forma de prisma triangular, con muestra tres caras y tres márgenes.
Epífisis distal o extremo inferior: La porción lateral de este extremo se expande formando el maléolo lateral, que tiene una cara articular para el talo.
Las principales causas de operación de tibia y peroné son las fracturas, estas se producen en cualquiera de las partes antes mencionadas y dependiendo de la ubicación, gravedad y complicaciones de la fractura se decide el tipo de operación de tibia y peroné que amerite cada paciente. A continuación se hará mención a las fracturas más frecuentes en ambas estructuras Oseas.
Fractura Diafisiaria de Tibia y Peroné
Representa hasta el 15 % de las fracturas del esqueleto, siendo la más frecuente debido a la exposición de ambos huesos ya que la cara anterior de este hueso está cubierta únicamente por piel y tejido celular subcutáneo.
Este tipo de fracturas es común en deportistas, otra patología asociada frecuentemente a las actividades deportivas de alta competencia es
Rodilla Del Corredor o Tendinítis del Tensor De La Fascia Lata y Glúteos
Fracturas de Diáfisis de Peroné
Las fracturas a este nivel generalmente no tiene mayor repercusión se producen principalmente por traumatismo directos. Sus síntomas pueden ser dolor en el sitio de fractura pero también pueden ser asintomáticas. En este caso no amerita operación, solo inmovilización bien sea con yeso o bota yeso ambulatorio.
Fracturas de Diáfisis de Tibia.
Esta se puede acompañar o no de fractura del Peroné, el tratamiento puede ser quirúrgico o conservador dependerá de las características de la fractura y complicaciones asocias, lo cual hablaremos mas adelante.
Mecanismo de Fractura de Tibia y Peroné
Estos se relacionan generalmente con la línea de fractura generada, pueden ser Indirecto, Directo o Mixtos.
Mecanismos Directos: la fuerza de impacto incide de frente al hueso, como un puntapié, la fractura se verá radiológicamente como una línea transversal. En el caso de aplastamiento o compresión la imagen radiológica será como fractura conminuta o multiples fragmentos.
Indirecto: la fuerza del impacto se transmite longitudinalmente en el hueso por cizallamiento, debido a dos fuerzas paralelas que van en sentido contrario, generando de esta manera un trazo de fractura oblicuo.
Torsión o Rotación: este mecanismo es común en esquiadores y se ven trazos de fracturas en forma de espiral
Fatiga: las fracturas por fatiga común en los atletas por sobre entrenamiento.
Síntomas de las Fracturas de Tibia y Peroné
La gravedad de los síntomas depende del mecanismo del traumatismo, el compromiso de los tejidos blandos y el grado de desplazamiento de la fractura. Los principales síntomas que sentirá si tiene fractura de tibia y peroné son:
Dolor intenso
Impotencia Funcional
Movimiento anormales
Crujido al momento del impacto
Inflamación de la pierna
Deformidad de la pierna
Para determinar si la fractura amerita operación de tibia y peroné se realiza con ayuda de la evaluación clínica la clasificación de la fractura. Existen diversas clasificaciones, las más utilizadas son las siguientes:
Fractura Cerrada o Expuesta
Fractura Estable o Inestable
Clasificación de Fracturas Cerradas o Expuestas
Fracturas Cerradas
Son aquellas fracturas que no tienen comunicación con el medio externo, y pueden dividirse a su vez dependiendo del grado de compromiso de los tejidos blandos según TSCHENE Y GOTZE en 3 grados
Grado 0 (Contusión Leve): en estos casos la lesión de tejidos blandos es escasa o nula.
Grado 1 (Contusión Moderada): se evidencian abrasiones superficiales con moderada inflamación del tejido celular subcutáneo.
Grado 2 (Contusión Intensa): la abrasión es profunda, con edema a tensión y vesículas.
Grado 3 (Contusión Grave): la tumefacción se mantiene a tensión con presencia de flictenas y síndrome compartamental.
Según esta clasificación puede variar el tratamiento desde inmovilización hasta la operación de tibia y peroné.
Las fracturas Grado 0 – 1: ameritan enyesado
Las fracturas Grado 2 – 3: requerirán de operación de tibia y peroné para fijación externa o interna.
Fractura Cerradas Desplazadas
Ante la evidencia del desplazamiento de los fragmentos será necesario la reducción de la fractura bien sea con anestesia local, regional o general cuando cumpla con los siguientes criterios:
Evidencia de un desplazamiento del contacto de las superficies mayor al 50% en el eje frontal y lateral.
Deformidad en Varo de 5°o más, deformidad en valgo y anteroposterior mayor de 10°.
Acortamiento mayor de 1 cm
Sin rotación evidenciable.
La necesidad de reducción puede ser un criterio para la operación de tibia y peroné, se realizara en aquellas fracturas cerradas inestables, y puede realizarse con enclavijado intramedular bloqueado con tornillos, fijación externa o placas compresivas AO.
Fracturas expuestas
Este tipo de fracturas en el siglo pasado era causa de amputación para evitar complicaciones que comprometieran la vida del paciente. Actualmente la decisión del tipo de operación de tibia y peroné que requiere el paciente depende de múltiples factores como:
Tipo de trazo
Grado de compromiso de tejido blando
Edad del paciente
Momento quirúrgico del fracturado al llegar a la emergencia
Este tipo de fracturas generalmente se acompañas de múltiples complicaciones asociadas al traumatismo que la ocasiono, por lo cual antes de la operación de tibia y peroné los médicos requerirán estabilizar las funciones vitales del paciente.
Luego de la estabilización del paciente, se realizan los estudios radiológicos pertinentes y la preparación pre-operatoria.
Finalmente es importante resaltar que tras la operación de Tibia y Peroné sera indispensable iniciar la terapia de Rehabilitación para retomar las actividades de la vida diaria.
Si quieres conocer cuales son las terapias para recuperar la actividad física posterior a la fractura de Tibia y Peroné no olvides leer Tratamiento y Rehabilitación de Fractura o Rotura de Tibia y Peroné
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