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Te saludo, de nuevo, para compartir contigo algunas reflexiones acerca de la paciencia, pero hacia sí mismo...
En teoría, todos creemos que somos capaces de tenernos paciencia, lo cierto es que, cuando un momento de prueba llega, es posible descubrir que nos hace falta más de la que creímos tenernos.
Y es que, sin darnos cuenta, podríamos ser tan exigentes con nosotros mismos esperando recuperarnos de un malestar físico o psico emocional que igual seremos con las personas que nos rodean… no seremos con otros lo que no somos con nosotros mismos.
Afortunadamente, aunque suene extraño, los momentos difíciles sirven de aprendizaje cuando no hacemos conciencia por las buenas de lo que necesitamos mejorar.
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Y se hace la luz…
En medio de un malestar de salud o de algo que nos está afectando psicológica y emocionalmente, es difícil hacer reflexiones profundas en un primer momento pero, cuando la tempestad disminuye, la reflexión llega como brisa suave que refresca
En ese momento, tenemos dos opciones:
Actuar con rebeldía y resentimiento, responsabilizando a medio mundo de nuestro malestar ó
Asumir con altura nuestra responsabilidad en lo que estamos viviendo y bebernos el aprendizaje que nos trajo la situación.
Como siempre, la elección es nuestra.
Y la paciencia por qué?...
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Porque en medio de un bajón en nuestra condición de salud, física o psico emocional, podemos tender a querer seguir adelante, a continuar sin compasión ninguna con nosotros mismos
Cual jefe tirano que desconoce la condición humana de su empleado y le exige que avance sin importar cómo está o se siente
A veces, somos tiranos de nosotros mismos y no nos damos cuenta.
Cuando asumimos que podemos sentirnos mal, que podemos fallar, flaquear y desfallecernos
Cuando entendemos que es necesario darnos la oportunidad de recuperarnos, de ayudarnos a sentir mejor, sin que eso implique que nos estamos rindiendo
Sin que implique que estemos dando poder al lado débil en nosotros, sino más bien amándonos en la dificultad,
Entonces, habremos comenzado a transitar el camino de la auto comprensión y la paciencia
Entendiendo la ciencia de la paz…
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Y que maravillosa es la sensación de sentirse en paz!
Después de pasar la situación difícil, los momentos oscuros, la sensación de fortaleza, de serenidad que acompaña al aprendizaje es un tesoro de gran valor que nadie te podrá quitar.
Quizás te preguntes: Y cómo se logra todo eso?
No hay recetas específicas, pero sí puedo decirte que, cada situación, trae grandes oportunidades de aprendizaje. Está en cada quien aprovechar lo mejor que cada una tenga para sí mismo.
Como en todo, se aprende haciendo. Es cuestión de ir practicando el hábito de PENSAR en lo que tiene para nosotros lo que vivimos como aprendizaje.
Pregúntate con frecuencia: ¿Qué tiene esta situación de aprendizaje para mí?
Date la oportunidad de SABER la verdad sobre ti
Y aquí entra la PACIENCIA CONTIGO para aceptar que no siempre las respuestas que obtengas sobre ti te gustarán, pero puedes cambiar tu panorama futuro, porque sólo tú tienes poder sobre tu destino…
Nadie que no enfrente primero la oscuridad y la guerra dentro de sí, será capaz de obtener y valorar la luz y la paz interior…
Y para que haya luz dentro de sí hay que hacer el esfuerzo por encender la fogata interior
Para que haya paz interna, hay que ganar la guerra que enfrentamos día por día con el más difícil y fuerte de los enemigos… nosotros mismos.
Quien logra vencerse a sí mismo es capaz de alcanzar cualquier victoria por difícil que parezca…
Te digo que vale la pena el esfuerzo por emprender el camino hacia sí mismo, pero necesitarás PACIENCIA…
Estas dispuesto?
Me despido, deseándote toda la paciencia necesaria para encender tu fogata interior…
Si quieres que otros piensen en este tema del que hoy te hablo, comparte esta reflexión..
Un gran abrazo.. nos leemos en el próximo post.