La viagra femenina ya ha llegado al mercado, por lo menos en Estados Unidos (después varias y largas disputas con la autoridad sanitaria estadounidense) y no tardará mucho tiempo en extenderse a Europa y, al resto del mundo.
En este post os queremos contar todos los detalles de esta pastilla rosa, para que cuando llegue a vuestra ciudad, lo sepáis todo.
Lo primero es contestar qué es addyi, es simplemente un compuesto químico que actúa en los neurotransmisores del cerebro ya que activa la serotonina (cómo hacen otros fármacos contra la depresión) e inhibe la dopamina, y su única función es solucionar el deseo sexual hipoactivo (TDSH) que es una disminución de deseos o fantasía de actividad sexual que llega a provocar un malestar y dificultar las relaciones personales. Hay que señalar que no soluciona ninguno de los problemas sexuales de origen físico.
La farmacéutica es clara sobre quién puede tomar este medicamento, solo mujeres que padecen TDSH y no hayan llegado a la menopausia. Dejando fuera a mujeres con menopausia o con enfermedades físicas y psíquicas que tienen un bajo deseo sexual (o incluso las mujeres que tengan problemas con su pareja).
Para comprobar la eficacia de esta pastilla rosa se realizan tres ensayos durante 24 semanas a 2.400 mujeres que mostrasen los síntomas mencionados con anterioridad y en las tres pruebas las mujeres dijeron que han notado mejoras en cuanto a sus relaciones íntimas y las angustias que el sexo les provocaba
Como todos los medicamento, este también tiene efectos secundarios como: mareo, sequedad en la boca, fatiga, insomnio...que son las más comunes, pero tiene otros efectos secundarios más graves como hipotensión (presión arterial muy baja) y pérdida de la consciencia. Todos estos efectos se pueden agravar si la ingesta se produce con alcohol. A pesar de esto los efectos secundarios son inferiores a los que podría provocar la viagra.
Por último queda decir que la viagra femenina y masculina se diferencian en todo, incluso en el color, una es rosa y la otra es azul. Ambas están creadas para solucionar problemas en el campo de las relaciones íntimas, pero cada una adaptada a cada sexo. En los hombres la viagra es un fármaco físico que se toma horas antes del acto sexual y su efecto termina minutos después; y la viagra para las mujeres es un fármaco psíquico que se debe tomar habitualmente.
Los médico y ginecólogos advierten que podemos estar ante otra enfermedad inventada para vender más; y que antes de acudir a ella para solucionar dichos problemas que se prueben otras medias como terapias conductuales hasta reinventar los encuentros sexuales.
Fuentes: El País
