Imagen: mauren veras/Flickr
El dia de hoy estaremos hablando de un tipo de infección por hongos es muy común en verano, debido al calor, al sudor y a las frecuentes visitas a las piscinas. De hecho, es en estas fechas estivales cuando aparecen más casos de esta molesta infección. Este padecimiento recibe su nombre debido a que es más común que aparezca en deportistas, debido a sus condiciones.
Esta infección se manifiesta en forma de sarpullido rojo, con ampollas e inflamación, que produce un intenso picor. Suele aparecer en la zona de la planta del pie, y entre los dedos, pues allí es donde se acumula más humedad a causa del sudor. No obstante, puede extenderse a todo el pie, e incluso a las manos, al rascarse.
El problema viene cuando el Pie de Atleta se complica debido a que el rascado frecuente de la zona afectada provoca heridas y que la piel se abra. Esto puede producir una complicación en la infección, pues las bacterias se introducirán bajo la piel, agravando el Pie de Atleta.
Para evitarlo, a continuación hay una serie de medidas que debes seguir:
Por ejemplo, secarse bien los pies debe ser primordial, y debemos evitar andar descalzos por zonas de posible contagio, como duchas comunitarias. Otra medida sencilla es aplicar crema hidratante entre los dedos de los pies, después de la ducha, cuidando que ésta se absorba bien antes de colocar el calcetín.
También es importante en verano, emplear zapatos que estén bien ventilados y que estén hechos con materiales naturales, como el cuero; o cambiar frecuentemente de calcetines para mantener los pies secos el mayor tiempo posible.
El tratamiento es sencillo, pero dependiendo del cuadro que presente la infección, puede durar varias semanas. El médico nos recetará algún tipo de pomada médica antimicótica, y deberemos extremar el cuidado y la higiene de nuestros pies durante este periodo.
Fuentes: Revista Saber Vivir; nlm.nih.gov
¿Has padecido alguna vez el Pie de Atleta?