Aquí breves recomendaciones para poner en práctica tanto en personas sanas como también en personas afectadas con algún grado de deterioro cognitivo.
Personas sin deterioro cognitivo:
Los puzzles son una forma eficaz y económica para estimular las capacidades cognitivas en personas sin deterioro cognitivo, ideales para ejercitar la mente jugando, los hay para todas las edades.
En este caso elegiremos puzzles para estimular las capacidades cognitivas, trabajar la motricidad fina y la coordinación oculo-manual y bimanual.
Personas con deterioro cognitivo moderado a grave:
Características psicopedagógicas: Se debe estimular la habilidad manual, imaginación e la inteligencia.
Desarrollan la motricidad.
Recomendacion: Elegir las de diseño divertido, colorido y moderno.
Atraen colores formas y aprende a agarrar y a encajar
Consiste en un puzzle encajable de 8 piezas con diferentes elementos básicos de higiene
Se deberá asociar el artículo con el uso al que se destina
Este tipo de puzzles estimula la imaginación
Descubre su entorno la naturaleza y su entorno
Juegos para estimular la motricidad fina:
Primero definamos a que llamamos motricidad fina, es la coordinación de los movimientos musculares pequeños como los dedos en coordinación con los ojos.
Aquí algunos juegos ideales para trabajar la motricidad fina, la coordinación relacionada con las habilidades motoras de las manos y los dedos.
Juego de paciencia para entrenar la motricidad fina
La memoria y la capacidad de asociación
También ideal para la rehabilitación de la motricidad de las manos
La llave se gira de tal modo que los tableros se encajan por completo
Los tableros se pueden girar
Así que se producen otras posiciones para la llave.
juego de Psicomotricidad
Caja de madera de aprendizaje con formas geométricas (Simba Dickie)
Tornillos y tuercas
Aprende a enroscar, atornillar, construir y asociar
Bloques y tableros con diseños
Por último recordar que el objetivo fundamental es el de ayudar en la estimulación de las capacidades cognitivas a través de distintos ejercicios y juegos, con el objetivo de potenciar las funciones cognitivas, mejorando la funcionalidad en la vida diaria.
En el caso de personas afectadas (Alzheimer, daño cerebral, Ictus, Parkinson), la estimulación cognitiva es llevada adelante por un especialista, por lo que es importante consultar en un centro de día o rehabilitación funcional, dónde mediante distintas técnicas de rehabilitación neuropsicológica, logran con éxito avances en áreas como la memoria, atención, concentración, lenguaje, función ejecutiva, orientación entre otras.