Con motivo del día Internacional del Autismo y para concienciar aún más de una enfermedad que es conocida como una patología digna de genios – según el psiquiatra Michael Fitzgerald personalidades como Mozart, Beethoven o el gran Albert Einstein lo han padecido -, me siento a escribir 10 curiosidades sobre el autismo.
Para los autistas, el tiempo pasa más rápido
Para las personas con autismo, el tiempo pasa más deprisa que para el resto. ¿Qué por qué? Porque continuamente están pensando y procesando información.
Les cuesta mentir
Por norma general, a los autistas les es muy difícil mentir, ya que ello implica controlar los gestos, y las emociones.
Buena retentiva
Los autistas pueden reproducir fragmentos de una conversación de memoria y de forma literal, lo que les hace aptos para tareas de memorización.
Orden ante todo
Las personas con esta patología son metódicas y muy ordenadas. También pueden madurar y razonar de manera normal, como cualquier persona.
Lío con las metáforas
Un autista puede entender qué es el cielo, las nubes e incluso lo que es una flor, pero evitan ante todo las metáforas: no las entienden ni comprenden.
Vivir en un entorno que les es familiar
Para los autistas, una regla fundamental es vivir en un mundo que se adapte a ellos, les sea sencillo y entendible. De otra manera no serían capaces de afrontar su día a día.
Buenas intenciones
Cuando una persona con autismo tiene un comportamiento que puede ser inadecuado, jamás hay que tenerlo en cuenta: tiene su explicación lógica y no lo hace con mala intención.
La imagen como lenguaje
La imagen es para los autistas su forma de expresarse, su lenguaje, el modo de entenderse con el mundo que le rodea.
Normales como todos los demás
El autismo no es una barrera para que se alcancen ciertas metas. Su capacidad a la hora de aprender es igual a la del resto.
Difícil comunicación
Para una persona autista la comunicación verbal le es extremadamente complicada: están continuamente traduciendo cualquier estímulo externo para poder comprender.