También te hemos comentado sobre el peligro de su acumulación en esta zona conflictiva tanto a nivel estético como para tu salud cardiovascular. Las arterias se irán obstruyendo a causa de la acumulación de grasa. La dieta libre de grasas saturadas es fundamental, limita la ingesta de alimentos ricos en ella como las carnes altas en grasa, la manteca, los aderezos como la mayonesa y la frituras. Disminuye el consumo de hidratos de carbono pero no los elimines por completo porque son necesarios para el buen funcionamiento del metabolismo, pues durante este proceso se convierten en energía. Asimismo aumenta el consumo de alimentos con bajo aporte calórico como la carne magra, la carne de pollo sin piel o pechuga también sin piel, vegetales y frutas. Ingiere 6 comidas al día con un lapso de tiempo entre ellas de no más de tres horas. Comiendo pequeñas porciones de alimentos para activar el metabolismo.
La hidratación también es fundamentad por ello siempre se recomienda que ingieras dos litros de agua a día.
Ya has hecho un cambio en tu alimentación, pues este cambio lo vas a acompañar con una rutina de ejercicio físico para perder barriga. En este sentido sabes que los mejores ejercicios son los aeróbicos o cardiovasculares porque son los que te van a ayudar a reducir esa grasa. Puedes hacerlos todos los días durante al menos media hora, pero no te agotes, comienza haciendo aeróbicos tres veces a la semana y luego aumenta los días y el tiempo progresivamente. Conjuntamente con los aeróbicos puedes hacer ejercicios abdominales pero los abdominales queman grasa con una combinación con aeróbicos.