¿Te resultan familiares estos consejos?
Desde bien entrada la adolescencia nos invaden y, a pesar de ya encontrarnos en otra etapa evolutiva, seguimos usando los criterios de antaño.
¿Quieres saber el porqué están desfasados y conocer los motivos por los que debes cambiar el chip?
· Prepararás un buen terreno para los inicios
Una de las primeras cuestiones que plantean los psicólogos es ¿Cómo empezó todo?. En los inicios se encuentra el grueso de información valiosa, que aunque pase inadvertida para los implicados, delimita la hoja de ruta de la relación.
O sino recuerda la famosa historia de Romeo y Julieta. El apuesto Romeo conoció a Julieta en una fiesta a la que fue invitado por un gran amigo suyo para aliviar su reciente desengaño amoroso con otra chica. Fruto de su despecho y queriendo reparar el dolor de su historia frustrada, se enamoró loca y perdidamente de la bella Julieta.
¿Moraleja? Nada es por casualidad.
En ese caso, privarte de expresar lo que sientes hacia esa persona por temor a no ser correspondido, a que huya o a que se confíe, implica preparar caldo de cultivo para una relación en la que se entienda la entrega como una amenaza, creando luchas de poder y estrategias insanas para obtener el afecto del otro.
· Podrás incitar interés en el otro
A: ¿Por qué te gusta?
B: Por qué es …, …, …, …, ¡y porque le gusto!
La atracción es bidireccional. Viene dada por el interés que nos despierta el otro pero también por lo que nos hace sentir al saber que le gustamos.
Si superas la inseguridad adolescente y le haces saber que te interesa, puede que le suscites un interés distinto al que hasta ahora se había planteado.
· Mostrarás madurez y sabrás si el otro dispone de ella
Manifestar tus deseos e intenciones es un potente indicador de seguridad y madurez personal. Sería sinónimo de algo así como Me gustaría estar contigo, ojalá que tú también. Pero si no es así, a pesar de no quererlo, lo respetaré.
¿No te sientes más tenso ocultándolo que diciéndolo? Por eso, muchos artistas al salir al escenario pronuncian un Estoy algo nervioso…, consiguiendo una inmediata sensación de tranquilidad.
El paso de ti para que me hagas caso nace del temor al rechazo. Pero os preguntaréis: ¿Y si es cierto?, ¿y si pierde el interés cuando me expreso?. Si esa persona se engancha en este tipo de juegos, es más que probable que no disponga de la suficiente madurez para construir una relación sana. Hacer caer a alguien en este juego es alimentar al eterno imposible: si me entrego te vas y si me voy te entregas.
· Sabrás si es mutuo
Expresar tus sentimientos e intenciones es una muy buena criba, te permite calibrar qué siente el otro y optimizar tu tiempo.
¿De qué sirve no consultar los resultados de un examen por miedo a que sea un suspenso? Si es así, estará suspendido lo consultes esta tarde, mañana o el mes que viene. Y la posterior sensación de fracaso será la misma, sólo que durante el tiempo en que no lo has consultado, no habrás podido poner remedio.
Exactamente lo mismo ocurre en pareja. El tiempo en que no desvelas las verdaderas intenciones, podrías estar dedicándolo a otros asuntos o a otras personas potencialmente interesantes.
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