Puede que durante el verano te hayas dejado llevar, permitiéndote caprichos y tolerando que tu disciplina se descontrolase. Pero ahora, no dejes que la llegada de septiembre te abrume tomando decisiones equivocadas. Es el momento de recuperar hábitos de alimentación, y también de aprovechar la vuelta para introducir rutinas más saludables, y eso nada tiene que ver de optar por opciones demasiado estrictas; dejar de comer, suprimir alimentos, o lo que es peor, quemarse en el gimnasio haciendo mal lo anterior.
Permítete tiempo para reflexionar sobre tus metas en este nuevo curso, evalúa las bases de tu alimentación previa, y valora mejorar tu rutina diaria. Para ello, ten en cuenta estos consejos para una rutina más saludable.
Ponte horarios
Establecer una rutina de horarios para comer, dormir y hacer ejercicio, es fundamental para recuperar la disciplina. Procura que se incluyan al menos 5 comidas al día, y que entre ellas pasen entre 3 o 4 horas como máximo, y que el ejercicio físico no sea a última hora de la tarde, para que puedas relajarte y no influya en la calidad de tu sueño, lo que ayuda perder peso.Prepara menús
Si planificas con antelación tus comidas, evitarás comer de forma inadecuada, haciendo cualquier cosa por falta de tiempo y/o de ingredientes, y no acabarás improvisando ese plato rápido y calórico que quieres evitar. Puedes recurrir a la ayuda de un nutricionista que te proporcione las pautas que necesitas para preparar tus menús, por ejemplo, a siete días vista para así tener todo preparado y llevarlos a cabo sin sorpresas,Haz lista de la compra
Esto es muy sencillo si tienes controlado el punto anterior. La elección de los ingredientes adecuados es la base para asegurar una alimentación adecuada, por ello, si tienes diseñado un menú saludable y llevas anotados los ingredientes que vas a necesitar para prepararlos, evitarás que tu carrito de la compra lleve productos indeseados con alto aporte calórico.Revisa tu forma de cocinar
Si quieres adoptar hábitos más saludables, para seguir una alimentación equilibrada no solo basta con la elección de los alimentos. Cocina en casa y elige bien la forma de cocinar; evita los fritos y rebozados, y apuesta por hervir, asar o cocinar al vapor.Reduce costumbres poco saludables
Nos referimos a hábitos poco saludables como abusar del consumo de café y alcohol, o comer desmedidamente entre horas. Evita lo primero introduciendo alternativas como el té o las infusiones sin azúcar, y procura llevar siempre contigo aperitivos saludables para media mañana o merienda, en Lev disponemos de varios snacks que saciarán la necesidad de dulce sin afectar negativamente a tu dieta.Vuelve a hacer ejercicio físico
Retoma tus entrenamientos. Empieza con sesiones cortas de 20-30 minutos y ve aumentando progresivamente. Lo ideal es repetir tres o cuatro veces a la semana, y para que la vuelta sea más llevadera, entrena en compañía. Si aún no tienes el hábito del deporte en tu rutina, este podría ser el momento de empezar a introducir ejercicio haciendo pequeños cambios en tu día a día; caminar más, subir escaleras, cargar bolsas de la compra o aprovechar las tareas de casa para introducir intensidad.Beber más agua
No hay que olvidar que mantenerse hidratado es esencial para nuestro organismo y piel. El agua no tiene calorías, ayuda a disminuir la retención de líquidos a la vez que permite que el hígado se desintoxique de los residuos acumulados durante el verano, y regula el transito intestinal.Introduciendo estos hábitos en tu día a día, con paciencia y sin desistir, te será muy sencillo retomar una una rutina más saludable . Y si necesitas ayuda para empezar de cero, los asesores expertos Lev pueden darte las pautas que te ayuden a llevar una alimentación equilibrada que te permita bajar de peso y recuperarte del verano, pero también, a hacer cambios en tu rutina para que se queden para siempre.
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