El desayuno es la comida más importante del día, ya que son los primeros alimentos que se ingieren después de un largo periodo de ayuno, mientras dormimos.
Un desayuno equilibrado, contribuye a un reparto armónico de las calorías durante el día y proporciona una ración de nutrientes.
Los nutricionistas aconsejan el consumo diario de la avena, ya que favorece nuestra salud y reduce el riesgo de sufrir ciertas enfermedades, como: las afectaciones cardíacas, enfermedades de la piel, alteraciones gástricas y diabetes.
A continuación, te mostraremos 8 razones para que empieces a comer avena todos los días:
Consigue una piel perfecta
En la avena abundan las vitaminas del grupo B, que contribuye a tener una buena de salud de nuestra piel y cabello; también contiene vitamina E, que actúa como antioxidante.
La avena aporta un buen número de aminoácidos esenciales y minerales, como: el potasio, que favorece la eliminación de líquidos y ayuda a mantener un correcto equilibrio de la piel, manteniéndola hidratada.
Ayuda al desarrollo muscular
Esto se debe a que tus músculos, recibirán más proteínas. Para funcionar correctamente, nuestro cuerpo requiere 8 aminoácidos esenciales, de los cuáles la avena contiene 6, siendo además, el cereal que contiene también más proteínas. Estos aminoácidos, junto con sus carbohidratos, ayudan a reparar tus músculos, después de los entrenamientos.
La avena es rica en antioxidantes, ya que ayudan a reducir la inflamación de las arterias, regulando la presión arterial. Además, ayuda a controlar los radicales libres, partículas que dañan las células de nuestro organismo y provocan enfermedades como: cáncer.
Repleto de energía
Si comes avena diariamente, estarás lleno de energía, ya que la avena es rica en carbohidratos, y como tiene un alto contenido calórico, nos aporta mucha energía.
Los deportistas que buscan una hipertrofia muscular, la comen todos los días, ya que al contener 6 de los 8 aminoácidos esenciales, ayuda a que nuestro organismo asimile las proteínas.
Tan sólo 100 gr de avena, nos aporta 380 calorías.
Favorece el tránsito intestinal
La avena contiene fibra soluble, que nos permite un enlentecimiento de la asimilación del almidón, en nuestro organismo, y por lo tanto, hace que nuestras digestiones sean más pausadas, regulando nuestro apetito, la ansiedad y nuestro tránsito intestinal.
Por lo tanto, nos ayudará a perder los quilos de más y a mantener nuestro peso ideal.
La avena, contiene betaglucanos, que ayudan a bajar los niveles de colesterol y triglicéridos, por lo tanto, te ayudará a mantener un estilo de vida saludable, protegiéndonos frente la aparición de enfermedades graves, como: hipertensión, aterosclerosis, derrames cerebrales, infartos y otras afectaciones cardíacas y del sistema circulatorio.
Previene la diabetes
Con la ingesta diaria de avena, evitaremos enfermedades como la diabetes de tipo 2, ya que los betaglucanos, previenen el aumento de glucosa en sangre después de las comidas.
Favorece la digestión
Debido a su contenido en fibra insoluble, de acción laxante, ayudará al intestino grueso, combatiendo los dolores de estómago, diarreas, gases, gastritis o úlceras de estómago. Los betaglucanos, también absorben los ácidos biliares, expulsados por nuestro intestino, facilitando el tránsito intestinal, previniendo el estreñimiento y ayudándonos frente a los problemas digestivos.
Según la Organización Mundial de la Salud, es aconsejable, consumir de 25-35 gr de fibra diariamente, para una correcta digestión.
Como ves, la avena tiene muchas propiedades beneficiosas para nuestra salud, por lo que si decides, añadir este cereal a tu alimentación diaria, notarás todos estos beneficios.
Para enriquecer más las preparaciones con avena, puedes incluir: canela, frutas frescas de temporada, frutos secos o lácteos bajo en grasas, como leche de soja, o yogurt bajo en grasas.
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Fuente: este post proviene de La maleta de Maggie, donde puedes consultar el contenido original.
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