PENSAMIENTOS POSITIVOS

"Somos lo que pensamos. Todo lo que somos surge con nuestros pensamientos. Con nuestros pensamientos construimos el mundo." (Buddha)

Somos lo que pensamos. La semilla de todo lo que somos y hacemos esta en nuestros pensamientos. ¿Estáis de acuerdo con esta afirmación?. Todo lo que esta hecho por el hombre comienza por un pensamiento. Incluso el como me siento, a veces esta impulsado por un pensamiento. Pongamos un ejemplo, María se despierta y empieza a organizarse el día. Tiene que llevar a los niños al cole, hablar un momento con la tutora de uno de ellos, llegar a tiempo para la reunión con su jefe, comprar el regalo para un cumple de los niños a la hora del café, así que hoy el café con los compañeros cortito sino imposible, terminar un informe y llamar a los clientes, alguno de ellos verdaderamente pesados, por no usar otros términos. Conforme se organiza el día los pensamientos tipo "que día más completito", "que querrá el jefe esta vez", "ese informe es una pesadilla no se acaba", "otro cumple de niños" y "encima tengo que llamar a ese cliente, precisamente a ese". ¿Como creéis que se sentirá al poner el primer pie en el suelo? Dinámica, con alegría o con ganas de quedarse en cama y esperar que llegue mañana. Yo diría que con ganas de quedarse en cama. El organizar su agenda del día no es lo que ha provocado esas ganas de quedarse, lo que lo provoca son sus pensamientos, probablemente haya tenido otros días peores, con la agenda más saturada, pero los pensamientos que lo acompañaban eran más positivos.

Pero conozcamos un poco mejor los tipos de pensamientos, lo que nos permitirá escoger los que nos interesa y apartar los que no nos interesan.

Pensamiento necesarios y mundanos: Pensamientos que tratan de la vida diaria. Por ejemplo, que preparo de comer, llamar al servicio técnico porque se ha roto la lavadora,..... Por poco interesantes que nos parezcan, sin ellos no podríamos funcionar.

Pensamientos inútiles: son lo que no tienen utilidad constructiva. Son pensamientos que se refieren a cosas del pasado o del futuro. Por ejemplo "por que me dijo eso, Si hubiera....... o ¿que va a ocurrir si...?, ¿qué haré si....?. Pensamientos de este tipo creamos muchos a lo largo del día (se ha calculado que creamos entre 30000 y 50000 diariamente). Aunque este tipo de pensamientos no son negativos propiamente dicho, nos roban energía, nos vacían de nuestra fuerza interior y nos hace sentir cansados. Nuestra capacidad de concentración se ve afectada y por eso si tenemos muchos pensamientos de este tipo nos robaran tiempo y energía. Todos sabemos que el pasado no lo podemos cambiar, en cuanto al futuro no tenemos ninguna bola de cristal que nos permita verlo. El aquí y ahora es lo que nos permitirá construir un futuro y cambiar las consecuencias del pasado dentro de nuestras posibilidades claro.

Pensamientos negativos: son los más dañinos, especialmente hacia nosotros mismos. Además que afectan a nuestras relaciones con los demás, nos causan perdida de fuerza interior, perdida de nuestra paz, afectan a nuestra autoestima, así como a nuestro rendimiento en todos los aspectos de la vida. Los pensamientos están basados en la ira, avaricia, celos, expectativas insatisfechas, etc. Envenenan nuestra mente y a la atmósfera de nuestro alrededor.

Pensamientos positivos: son los únicos que nos permiten acumular fuerza interior y nos capacitan para ser constructivos. Son los que siempre dan beneficio en todas las situaciones sin atraparnos en la apariencia externa de una situación. Pensar positivamente no significa que ignoremos la realidad a nuestro alrededor y pretender vivir en lo irreal o pretender ser otro. Por ejemplo, si a nuestro hijo se le diagnostica autismo, el repetirnos o negar que lo es, no es positivo. Es negar una realidad, si estoy enfermo, repetirme que estoy sano una y otra vez, no mejorara la situación. Pensar positivamente significa ver los problemas pero al mismo tiempo ser capaces de encontrar soluciones. Muchas veces esto requiere paciencia, sentido común y mucha tolerancia a la frustración.

Una persona que piensa positivamente sera consciente de las debilidades de los demás pero aún así dirigirá su atención hacia las buenas tendencias de los demás. Este tipo de pensamiento nos da el sentimiento de contentamiento interior y gracias a esto nuestra expectativas hacia los demás disminuyen, además nos permitirá aceptarlos tal y como son. También seremos capaces de darnos tal y como somos, con nuestras limitaciones y nuestros talentos. Esto nos permitirá crear relaciones duradera y armoniosas.

Para las personas con una actitud positiva los obstáculos son la oportunidad para mejorar, son simplemente un reto a superar que nos permitirá mejorar como persona, como profesional o como padres. Pero hay que recordar que el pensamiento positivo por si solo no cambiará las cosas, no es un varita mágica que hará desaparecer los problemas. El pensamiento positivo es el primer paso que te llevará a la solución, además del pensamiento necesitamos la acción. Si nos sentimos mal, vamos al medico y nos diagnostica problemas de tensión, nos da unos consejos de estilo de vida y un tratamiento. Si cuando salimos aceptamos que tenemos un problema y pensamos "voy a mejorar", pero luego no pasamos a la acción, el pensamiento positivo no nos va a mejorar la tensión por si solo. ¿Verdad?, eso lo tenemos todos claro, pues a veces se nos olvida pasar a la segunda fase. La acción.

Pasos para mejorar la vida a través del pensamiento positivo

1. Visualiza tus metas cada día y llena tu mente de imágenes positivas acerca de aquello que vivenciarás cuando lo logre. Por ejemplo, si comienzas una rutina de salir andar para mejorar tu salud, visualiza lo satisfecho que te sentirás al terminar el reto diario propuesto.

2. Usa los pensamiento positivos como factores determinantes a la hora de tomar decisiones. Por ejemplo los beneficios que obtendrás al salir a caminar, mejorar la salud, disminución del estrés, si sales con amigos mejora de las relaciones sociales, disfrutar de un momento para ti,....

3. Las actitudes repetitivas se convierten en un hábito. Cuando te acostumbre a caminar tu cuerpo te pedirá esa dosis de ejercicio saludable cuando llegue el momento.

4. Establece los hábitos que te llevarán a lograr los objetivos y metas más importantes de tu vida.



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