En este caso se trata de una investigación llevada a cabo por la Universidad de Illinois, también en Estados Unidos, que señala que el tinnitus obliga al cerebro a un esfuerzo extra que acaba generando cansancio y problemas de concentración.
Los investigadores utilizaron escáneres IRM de los pacientes y hallaron que el tinnitus se encuentra en una región del cerebro llamada 'precúneo', que a causa del pitido en el oído que experimentan los afectados y afectadas se conecta con la denomina 'red de atención dorsal', que se activa cuando algo retiene la atención de la persona. Esta activación es la que explica que las personas con acúfenos no estén realmente descansando cuando creen estar recuperando fuerzas.