En concreto, la función que cumple la Lidocaína es la de bloquear el envío de la señal de dolor al cerebro. ¿Cómo hace esto? Al aplicar esta pomada en una zona concreta, se reduce la conducción de impulsos nerviosos cerca de la misma, bloqueando el estímulo del dolor. Por su parte, cuando se aplica con inyección local, se realiza en torno a los nervios o las zonas donde se va a proceder a realizar una intervención quirúrgica.
¿Cuáles son los principales usos de la Lidocaína?
Tal y como hemos comentado, la Lidocaína está considerada un anestésico local. Así, algunas de sus utilidades más extendidas son:- Mitigar dolores y picores causados por heridas. En este caso, se debe aplicar una cantidad muy pequeña sobre la herida. Además, existen parches de lidocaína que se emplean para cubrir cicatrices de cirugías que resulten dolorosas.
- Tratamiento para el dolor de hemorroides o fisuras anales. Las hemorroides se producen por el hinchazón de una vena en la zona anal o al final del recto. Es un problema muy común, que puede derivar de una diarrea, de problemas de estreñimiento, o estar relacionado con la obesidad, el embarazo… Así, pueden resultar muy molestas, causando picazón, dolor intenso, sangrado… De este modo, para tratarlas con Lidocaína, lo que tenemos que hacer es aplicarla antes de ir al baño.
Por su parte, las fisuras anales son desgarros en el esfínter, a causa de daños prolongados que pueden derivar de un estreñimiento crónico, continuas diarreas… Así, a la hora de tratarlas con Lidocaína, debemos tener en cuenta que esta se aplica después de ir al baño a defecar.
- Además de para el dolor, la Lidocaína de uso tópico también puede ser empleado en problemas de eyaculación precoz. Al aplicar una pequeña cantidad sobre la punta del pene antes de tener relaciones, hace que pierda parte de la sensibilidad. Eso sí, hay que empezar aplicando muy poca cantidad (aproximadamente el tamaño de un guisante), e ir aumentando o disminuyendo en función del resultado conseguido.
- En el caso de la Lidocaína inyectada, es muy empleada en odontología como anestésico para pequeñas intervenciones.
¿Y qué precauciones hay que tener en cuenta con la Lidocaína?
Como con cualquier medicamento, es muy importante que sea un profesional de la medicina el que nos lo haya recomendado. De hecho, es un fármaco sujeto a receta médica. Será tu médico el que te indique además la dosis necesaria, que habitualmente se encuentra entre 1 a 2 ml de pomada tanto en niños como adultos, y nunca más de 5 gr al día, salvo prescripción médica.En cualquier caso, al igual que otros medicamentos, la Lidocaína de uso tópico, aunque suele ser de buena tolerancia, puede tener ciertos efectos, como irritación en la piel, quemazón…
¿Y en caso de embarazo y lactancia? Se recomienda no hacer uso de este tratamiento, salvo que el médico así lo indique.
Por su parte, en lo que respecta a la conducción y al consumo de alcohol, no se han observado que el uso de este medicamento pueda afectar.
Así, recuerda que la automedicación está completamente contraindicada. Antes de iniciar cualquier tratamiento, acude a tu médico y sigue sus recomendaciones.