LA PÉRDIDA DE UN SER QUERIDO

Cuando un ser querido se marcha nos quedamos solos, vacíos, con un sentimiento de impotencia por si podíamos haber hecho algo más por ellos. A veces hasta estamos enfadados con Dios, con el mundo e incluso con la persona que se ha marchado porque lo ha hecho demasiado pronto, o porque no nos hizo caso cuando insistíamos que debía cuidarse o porque se marchó sin haber podido despedirte de ella

Esa tristeza y esa culpabilidad que arrastramos no debe ser perdurable el resto de nuestra vida porque al hacerlo nuestro cuerpo se deteriora más rápidamente si no vivimos con tranquilidad y paz

Cuando podemos despedirnos de nuestros seres queridos, podemos preguntarles porque se han marchado tan pronto, porque nos han dejado aquí y ellos han marchado cuando ellos tenían toda una vida por delante...

Cuando podemos contactar con estos seres que ahora son de luz, la respuesta puede que te sorprenda, cada uno tenía su razón para abandonar este planeta y seguir en su forma original que es ser una ser de luz puro, lleno de amor

Se puede establecer un puente entre la persona que se ha marchado y tu, un lugar donde podéis reuniros cada vez que lo necesitéis, porque cuando una persona que llora y siente dolor por otra que ya no está, debe poder restablecer su equilibro, porque el hecho de no sentir dolor o no llorar cuando se piensa en la otra persona desaparecida no quiere decir que la vayas a olvidar, que ya no estará a tu lado, al contrario, podrás disfrutar de ella y seguirás recordándola en los momentos felices sin que te duela pensar en ella porque ya no está


No has de sufrir porque el duelo por alguien que ya no está entre nosotros ha sido impuesto por la sociedad, y debes mirar de restablecer el equilibrio perdido, porque al no restablecerlo arrastrarás una pena y dolor que a veces se hace insoportable y esa angustia por los que ya no están, no es buena

Cuando pregunto: ¿Cómo te gustaría que hubiera sido ese momento? Y me responden: me gustaría que todavía estuviera vivo... Es normal y lógico, no obstante, no podemos revertir lo que ya está hecho, no podemos revivir a la persona en carne y hueso, lo que podemos es llamar a la energía que estuvo ocupando el lugar de tu ser querido y hablar con él, y explicarle como te sientes y hacerle las preguntas que necesites hacerle o pedirle perdón por lo que sea que has de pedírselo y tu ser querido te responderá y te abrazará
Y ese abrazo lo notarás como si todavía estuviera aquí contigo y al haber podido despedirte tu pena y tu dolor irán desapareciendo poco a poco y cuando vuelvas a pensar en esa persona ya no sentirás ese sentimiento de angustia y vacío, sino que sabrás que puedes ir a ese lugar ya establecido donde puedes hablar con tu ser querido y sabrás del cierto que no te ha dejado sola/o porque él está siempre contigo

Te mando un abrazo de amor y luz

Susana

Sanación Espiritual Energética