Unas afecciones que provocan intensas molestias en los más pequeñines de la casa y que, por suerte, pueden combatirse combinando los medicamentos recetados por el doctor con los trucos de salud naturales.
Entre los mejores ingredientes para elaborar remedios caseros para los mocos de los niños hallamos el tomillo, una planta con excelentes propiedades para la salud y el bienestar.
Ingredientes
Una cucharadita de hojas de tomillo
Media cucharadita de miel
Un vaso de agua mineral
Una pajita (opcional)
Pasos a seguir
Calienta el agua mineral.
Justo antes de que rompa a hervir vierte las hojas de tomillo en su interior y retírala del fuego.
Tapa el recipiente para que el líquido se empape de todas las sustancias presentes en el tomillo, ideal para curar los resfriados y para los mocos de los niños.
Deja que la infusión repose durante unos 15 minutos.
Pasado ese tiempo filtra la tisana con la ayuda de un colador para retirar las hojas.
Endulza este té de tomillo con un poquito de miel, un producto que, además de poseer un delicioso sabor, actúa como un antiinflamatorio natural.
Si lo deseas, puedes dar de beber la infusión a tu peque usando una pajita. De este modo, la ingesta será más sencilla para el niño o niña.
El tomillo actúa como un expectorante, por lo que es capaz tanto de acabar con la tos como de descongestionar la nariz y de poner fin a los mocos.
Recuerda que las plantas como el tomillo no están indicadas en niños muy pequeños, por lo que, si tu hijo es todavía muy chiquitín, lo mejor será que hables con su médico antes de poner en práctica remedios caseros elaborados con tomillo.
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