La forma más común de fracturarse el escafoides es una caída sobre la muñeca en una posición extendida. Otras causas pueden incluir el traumatismo directo, como con una pelota de béisbol golpea la muñeca o incluso un traumatismo por un puñetazo.
SÍNTOMAS DE LA FRACTURA DEL ESCAFOIDES
Las fracturas del escafoides son a menudo difíciles de detectar en parte porque no suele haber deformidad visible. El dolor articular de la muñeca, el hinchazón y los hematomas se localizan en la base del pulgar. Las actividades funcionales, como la sujeción y la torsión de la muñeca puede reproducir el dolor.
El área más común de dolor es en la región conocida como la tabaquera anatómica. Este espacio está situado justo debajo del pulgar, cerca de la muñeca. Cuando el pulgar se extiende, dos tendones se hacen más visibles. Esta tabaquera se encuentra entre estos dos tendones. Si la aplicación de presión en este espacio se reproduce el dolor, puede haber una lesión en el escafoides.
DIAGNÓSTICO DE LA FRACTURA DE ESCAFOIDES
Para determinar si existe una fractura se utilizan habitualmente los rayos-x. Uno de los problemas es que los rayos X no siempre muestran la fractura de escafoides y pasa desapercibida. Si los síntomas y el mecanismo de la lesión son compatibles con una posible fractura, la muñeca será tratada generalmente como una fractura, aunque las radiografías sean negativas. Se suele recomendar otra radiografía un par de semanas después. Otras pruebas como una resonancia magnética o un escáner también se pueden recomendar.
El hueso escafoides es excepcional ya que tiene un suministro de sangre muy limitado. Una fractura de este hueso con frecuencia puede dañar el riego sanguíneo, dando como resultado que la fractura sea incapaz de curar y una necrosis avascular del hueso secundario a la lesión. Debido a este suministro de sangre limitado, el diagnóstico precoz de la lesión es necesaria para asegurar el tratamiento adecuado.
TRATAMIENTO DE LA FRACTURA DE ESCAFOIDES
En el caso de una fractura, los rayos X se repiten en intervalos periódicos para monitorizar el progreso de curación. Debido a que el suministro de sangre es limitado, las fracturas de escafoides pueden tardar hasta 12 semanas para sanar. Si la curación no se está produciendo en un tiempo razonable o si hay una fractura desplazada, la cirugía será necesaria. El tratamiento quirúrgico de la fractura de escafoides consiste en clavar el hueso para reconectar los extremos de la fractura, y después inmovilizar.
En algunos casos, incluso con la cirugía, la curación del hueso no se produce. Esta situación se denomina necrosis avascular que simplemente significa que el tejido óseo ha muerto secundario a una falta de riego sanguíneo. En tales casos, el uso de un injerto de hueso con su aporte vascular propio puede ser recomendado.
Para una fractura sencilla o simple, se recomienda la inmovilización de la zona lesionada para las primeras 4-6 semanas. Ya sea con un yeso o una férula (preferible si existe inflamación) para minimizar el movimiento. Con el uso de un inmovilizador, se quita periódicamente para usar el hielo, y ayudar a reducir la inflamación y minimizar el dolor.
Después, una vez haya consolidado la fractura, la fisioterapia se puede recomendar para ayudar a restaurar el rango de movimiento y la fuerza. La protección de la zona utilizando un protector de muñeca se recomienda durante las actividades de alto riesgo.
Una fractura de escafoides puede ser un tipo de fractura de muñeca y requiere atención médica inmediata para ayudar a asegurar el mejor resultado posible.
RESUMEN DE LA FRACTURA DE ESCAFOIDES.
El escafoides es un hueso del carpo que se suele lesionar por una caída con la muñeca extendida.
Los síntomas más típicos son dolor en la tabaquera anatómica, hinchazón y hematoma.
Es una fractura que puede pasar desapercibida en la radiografía las primeras semanas por lo que se recomienda hacer un seguimiento.
Una complicación grave es que el escafoides está poco vascularizado por lo que puede evolucionar a una necrosis avascular, por lo que hay que empezar el tratamiento lo antes posible.
El tratamiento consiste en inmovilización, y tratar el dolor, la inflamación, recuperar la movilidad y la fuerza con fisioterapia.
Administrador Fisioterapia
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