Ejercicios de espalda para prevenir las escápulas aladas

Los músculos de la espalda son los tejidos que se encargan de movilizar a las estructuras óseas que componen a la columna vertebral y a la articulación del hombro, por eso es importante que se mantengan fuertes pero al mismo tiempo con elasticidad suficiente para intervenir en los movimientos que necesitamos para la ejecución de las actividades de la vida diaria. 

Cuando hay presencia de disfunciones en la musculatura del tronco será común encontrar la aparición de signos característicos, por ejemplo en situaciones de debilidad de los romboides, serrato y trapecio, se pierde la estabilidad de la escápula, por lo que aparece una condición clínica denominada escápulas aladas.

¿Qué puedo hacer para prevenir las escápulas aladas?

La escápula alada es un término que se utiliza en el área de la salud para describir a aquellas condiciones clínicas en las cuales los omóplatos pierden su posición normal, por lo que se observan en forma de alas cuando se analiza la espalda.

"Las escápulas aladas son un tipo de condición en la cual los omóplatos se encuentran en una posición que no es fisiológica, por lo que se producen variados síntomas"

Si bien esta alteración musculoesquelética puede ser ocasionada como consecuencia de alguna patología subyacente, también puede desencadenarse por problemas en la postura y por falta de ejercicio en los músculos que estabilizan las escápulas, por lo que la prevención radica en entrenar toda la musculatura de la espalda mediante ejercicios especializados y personalizados.

Aunque existen muchos ejercicios que pueden ayudar tanto a prevenir como a corregir los problemas en los que el movimiento escapular se afecta, a continuación se presentan algunas ideas para mantener fuerte la musculatura del tronco:

Ejercicios de Pilates para fortalecer los músculos de la espalda

El Pilates es un método antiguo que al brindar grandes beneficios para la salud general, se emplea actualmente como parte del tratamiento de lesiones musculares y esqueléticas pero también para prevenir que se desencadenen disfunciones en los distintos tejidos del cuerpo. Es por eso que en nuestro canal de youtube de FisioOnline conseguirás una variedad de actividades para incrementar la fuerza, la flexibilidad, mejorar la postura y trabajar la respiración, todas funciones necesarias para mantener el cuerpo sano. 

Entonces, en el vídeo que se muestra a continuación podrás encontrar algunas ideas que te ayudarán no solo a prevenir la aparición de escápulas aladas, sino también de dorsalgias, hipercifosis y de contracturas musculares.

Ejercicios para ayudar a estabilizar la escápula

El músculo romboides, trapecio y el serrato mayor son los encargados de estabilizar a los omóplatos, por lo tanto sus alteraciones generan disfunciones en el movimiento escapular y la aparición de síntomas como el dolor muscular. Por consiguiente es necesario que durante el entrenamiento para disminuir el riesgo de que aparezca la escápula alada se trabajen esos tejidos de la parte posterior del tronco. 

Esos ejercicios que pueden ayudar a estabilizar la escápula es importante que sean realizados activamente, es decir por parte del paciente ya que se ejecutan buscando corregir la postura no solo de la espalda, sino también de hombro, cabeza y cuello.

"Además de los ejercicios de fortalecimiento es necesario planificar entrenamientos de los demás tejidos del cuerpo, por lo que se recomiendan estiramientos, movilizaciones y automasajes"

Automasajes y otras recomendaciones 

Además de los ejercicios de fortalecimiento y los que ayudan a mantener el movimiento normal de los omóplatos, es necesario que se incluyan algunos cambios en la vida cotidiana para disminuir las probabilidades de lesiones musculoesqueléticas, por tanto en fisioterapia recomendamos lo siguiente:

Si trabajas en posición de sedestación integra pausas activas cada hora para prevenir las contracturas.

Realiza estiramientos en los que se trabaje toda la columna, piernas y hombros.

Corrige la postura de todo el cuerpo mediante actividades de consciencia corporal.

Puedes aprender automasajes para aplicarlos en casos de tensiones musculares y dolor.

Aplica compresas calientes en la espalda para ayudar a relajar.

Si realizas algún deporte recuerda calentar antes y estirar después, así como pausar cada cierto tiempo para evitar que aparezcan sobrecargas.

Incluye en el entrenamiento, el trabajo de la propiocepción y la coordinación de los movimientos de los miembros superiores e inferiores.
A parte de lo descrito también es necesario que la persona mantenga una alimentación balanceada, asistir regularmente al fisioterapeuta, realice ejercicio de forma regular, incluya actividades recreativas para evitar el estrés y que otros factores emocionales desencadenan la aparición de procesos patológicos.



Sabrina Vielma

22/11/2020