El dia de hoy estaremos hablando de las formas de tratar la fibre hemorrágica, tras la muerte en Madrid de un hombre de 62 años y el contagio de una enfermera que le trató por un virus que produce fiebre hemorrágica, todas las alarmas han saltado por el desconocimiento de este tipo de enfermedad. Saber qué es, cómo se transmite y cuáles son los síntomas puede alertarnos y darnos algunas claves para reconocer este tipo de infección vírica. Hoy te revelamos estas incógnitas para que toda la información posible esté en tu mano.
¿Qué es?
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo es una enfermedad que se extiende por África, Oriente Medio o Asia, lugares situados por debajo de los 50º de latitud donde la garrapata que la transmite encuentra el límite geográfico que constituye su vector principal, según la Organización Mundial de la Salud. La picadura de una garrapata infectada por este virus causa un cuadro de fiebre hemorrágica con un tasa de mortalidad que alcanza hasta el 40%. De este modo, las dos personas afectadas han sido los primeros casos de esta enfermedad detectados en Europa Occidental, tal y como ha confirmado la OMS.
¿Cómo se transmite?
La transmisión se produce por la picadura de una garrapata que tenga el virus. Para que esto llegue al ser humano, o bien se produce una picadura directa de la garrapata o, más frecuentemente, por el contacto que pueden tener las personas con la sangre o tejidos de animales infectados. Los colectivos que se encuentran más en riesgo por este tipo de enfermedad son los veterinarios, ganaderos o trabajadores de los mataderos. La transmisión entre seres humanos se da por el contacto con fluidos infectados, sangre, secreciones u otros líquidos corporales. La contaminación del instrumental médico y su mala esterilización puede estar también detrás de un contagio.
¿Cuáles son sus síntomas?
En este punto, es necesario conocer el periodo de incubación de la enfermedad. Si la picadura de la garrapata es directa, hablaremos de un tiempo estimado de uno a tres días, con un máximo de nueve. Si el contagio se produce a partir del contacto con animales infectados, el periodo de incubación es de entre cinco o seis días, con un máximo de trece. Hay que recordar también que para este tipo de virus no hay vacuna, por tanto conocer la sintomatología y acudir con la mayor premura a un centro médico se convierte en la más efectiva de las curas. Estos son sus principales síntomas:
- Los primeros días se presentan de forma súbita en forma de fiebre, mialgia (dolor muscular), mareo, dolor y rigidez de cuello, lumbago, cefalea, irritación de los ojos y fotofobia (hipersensibilidad a la luz). Las náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal y dolor de garganta al principio, seguidos de bruscos cambios de humor y confusión, pueden ser también parte de los indicios de contagio.
- Del segundo al cuarto día la agitación puede dar paso a somnolencia, depresión y debilidad. Puede presentarse dolor abdominal en el cuadrante superior derecho, con hepatomegalia detectable.
- Otros signos clínicos posibles son taquicardia, inflamación de los ganglios linfáticos, y erupción por hemorragia cutánea en mucosas internas, por ejemplo en la boca y la garganta, y en la piel.
- Normalmente hay signos de hepatitis, y los pacientes muy graves pueden sufrir un rápido deterioro renal. A partir del quinto día de la enfermedad, puede haber insuficiencia hepática o pulmonar repentina
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