Un peeling, es un tratamiento de carácter estético, en el cual se produce un daño controlado sobre la piel a través de un medio físico, químico o mecánico, con el fin de obtener un efecto terapéutico.
Gracias a éste tipo de tratamiento, se logra una renovación de las capas superficiales de la piel consiguiendo un intercambio celular adecuado. Además de eliminar las células muertas, activa la circulación y mejora el brillo y la luminosidad de la piel.
Los peelings, además de su principal efecto exfoliante que produce una descamación adecuada, disminuyen los efectos del envejecimiento y mantienen una morfología y fisiología cutánea apropiada.
El envejecimiento cutáneo es un conjunto de cambios biológicos que se producen en la piel debido al paso del tiempo, están causados por muy diversos factores como los genéticos, metabólicos, hormonales, la exposición solar, entre otros.
¿Cómo se clasifican según la capa de la piel donde actúan?
Superficiales: Tienen acción sobre toda la epidermis, son ideales para el tratamiento del acné, manchas epidérmicas y fotoenvejecimiento cutáneo.
Se consideran procedimientos sencillos y son los más populares, tanto por su facilidad de aplicación como por la recuperación inmediata del paciente y retorno a sus actividades cotidianas. Adicional a esto tienen escasos efectos adversos.
Entre los agentes que se utilizan en éstos tipos de peelings se encuentran: el ácido retinoico, los alfahidroxiácidos, el ácido tricloroacético (al 20-25%) y la resorcina, los dos últimos deben ser aplicados por un médico especialista, al igual que los peelings medios y profundos.
Medios: Su acción se basa principalmente en la dermis superior. Su concentración es mayor que los peeling superficiales, por lo que su acción cutánea es más profunda.
Trabajan sobre las manchas pero no tienen acción sobre las arrugas de movimiento y sus efectos pueden durar de seis meses hasta dos años. Luego de su aplicación se debe evitar la exposición solar directa por un tiempo determinado.
En su caso, las lesiones por fotoenvejecimiento y acné responderán más efectivamente, pero requieren más cuidado que los primeros.
Los que producen efecto en ésta capa de la piel son el ácido pirúvico, el ácido tricloroacético al 30-35 % y los peelings combinados.
Profundos: Tienen acción hasta la dermis media, prácticamente han sido sustituidos por las técnicas de rejuvenecimiento facial con láser y dermoabrasión.
Se usan en casos de fotoenvejecimiento, manchas profundas y cicatrices post-acné, pero están en desuso, ya que requieren anestesia local o sedación, y ser realizadas en un quirófano por personal médico.
Para lograr efecto de peeling profundo se necesitan ser realizados con ácido tricloroacético en concentraciones mayores al 35 % y el que se utiliza más comúnmente, el peeling con fenol.
Los peelings profundos logran un efecto lifting pero tienen la desventaja de que las posibilidades de complicaciones son mucho mayores.
La indicación para utilizar un determinado agente de peeling y su concentración la determinará el experto según su diagnóstico de la lesión dérmica y la profundidad anatómica a la que esté situada, lo cual en ocasiones es bastante difícil.
Conoce los tipos de peelings que hay
Químicos: Se aplican diferentes tipos de ácido según lo que se desee conseguir.
Mecánicos: Este tipo de peelings se realizan con cepillos, cristales, etc. Un ejemplo de éstos es la microdermoabrasión con punta de diamante.
Físicos: Se realizan mediante la aplicación de luz láser.
¿Cuáles son las indicaciones de un peeling?
Envejecimiento cutáneo
Arrugas superficiales
Acné
Lesiones hiperpigmentadas (manchas faciales)
Cicatrices de acné
Para conseguir luminosidad y brillo en la piel
Poros dilatados.
Contraindicaciones del tratamiento
Intervención quirúrgica previa en la zona a tratar (menor de 4 meses)
Herpes simple
Dermatitis (seborreica, atópica o perioral)
Acné rosácea
Telangiectasias faciales
Posterior a depilación con cera
Vitiligo
Lifting reciente
Heridas abiertas
Uso de tretinoína
Embarazo
Exposición solar intensa reciente
Procesos neoplásicos
Procesos cutáneos locales, inflamatorios o eruptivos
Conoce los riesgos de éste tratamiento
Cambios hiperpigmentarios
Cicatrices
Pérdida de la sensibilidad
Infecciones en el área tratada
Hipopigmentaciones
Quemaduras
¿Cómo debes prepararte para un peeling?
Es necesario que suspendas tres días antes de la aplicación del tratamiento el uso de cremas que contengan ácido retinoico o cualquier otro agente irritante.
Evita el sol directo en la zona a tratar por lo menos 15 días antes.
¿Cuáles son los cuidados que debes tener después?
Es de suma importancia que comprendas que es imprescindible la utilización de protector solar con factor de protección mayor a 30 posterior a la aplicación del tratamiento. debes utilizarlo varias veces al día, ya que su efecto es limitado.
Debes esperar un mínimo de 15 días antes de exponer directamente al sol la zona bajo tratamiento.
Son muchos los beneficios que puedes obtener luego de un tratamiento con peeling, independientemente de la profundidad y el tipo utilizado, lo más importante es que tengas en cuenta los cuidados que debes tener antes y después y que te coloques en manos expertas.
Si el peeling a ser realizado será medio o profundo, debes acudir con un profesional de la medicina, así te evitarás dolores de cabeza.
Elizabeth Urbina