Beneficios de la fisioterapia para embarazadas

A lo largo de todo el proceso de embarazo, el cuerpo de la mujer atraviesa diferentes transformaciones que pueden ocasionar dolores y molestias. Los cambios físicos van más allá del aumento de la barriga, pudiendo presentarse también dolores de espalda, cintura, caderas, articulaciones y músculos. Por esta razón, es importante el acompañamiento de un fisioterapeuta que permita ir guiando el proceso de adaptación física para reducir al máximo posible los dolores, así como ayudar en la preparación del cuerpo para el parto y la compensación de los cambios en el organismo.

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Las caderas en el embarazo

El accionar de la hormona relaxina durante el embarazo hace que se ensanchen las caderas. Esto se debe a que se ablanda la sínfisis del pubis para aumentar el espacio que dará paso al bebé durante el parto. En un embarazo normal, la media de ensanchamiento es de 2/3 milímetros. En situación habitual de ausencia de embarazo el espacio mide 4/5 milímetros. En casos donde hay 10 milímetros o más, se habla de pacientes con diástasis.

La separación provoca dolor y molestias al caminar, impidiendo bajar o subir escaleras, dolor al separar las piernas, dolor en la parte baja de la espalda, en el suelo pélvico y en la zona anterior de las piernas. El trabajo del fisioterapeuta en estos casos, con la conformidad del médico y el paciente, en técnicas suaves para manipulación articular. A través de electroterapia con ultrasonidos se trabaja para aflojar la musculatura tensa. También se incluyen técnicas de aplicación de frío, reposo activo y uso de fajas especiales que ayudan a reducir los dolores y aspectos negativos de esta dolencia.

¿Qué beneficios trae la fisioterapia a las mujeres embarazadas?

La realización de ejercicios de fisioterapia en mujeres embarazadas ayuda a la prevención de lesiones, pudiendo prevenir la lumbalgia y la ciática que normalmente se cuentan entre los dolores habituales de las pacientes embarazadas. También es una forma de evitar la acumulación de líquidos, gracias a los masajes evacuativos que reducen la hinchazón y la sensación de piernas cansadas.

Por otra parte, los ejercicios de suelo pélvico sirven como preparación para el momento del parto. Un suelo pélvico tonificado, flexible y fortalecido ayuda a impedir secuelas después del parto, como la pérdida de orina. El trabajo de los fisioterapeutas en esta parte del cuerpo incluye técnicas de electroestimulación, biofeedback, masaje perineal e hipropesivos. EL fisioterapeuta te ayudará y guiará para hacer correctamente ejercicios que ayuden en la preparación general antes del parto.

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Por último, otro beneficio importante de la fisioterapia para embarazadas es el aprendizaje de técnicas de respiración que ayudarán a reducir las molestias e inconvenientes del parto. En este caso, además de los dolores físicos, también son técnicas beneficiosas para reducir la ansiedad y el estrés.

El embarazo es una etapa que puede resultar en extremo alegre y placentera, pero que también incluye momentos difíciles. Por eso, a través del trabajo con profesionales de distintas áreas, como la fisioterapia, se pueden realizar técnicas que apunten a reducir lo más posible los elementos negativos en el cuerpo y la personalidad de las mujeres embarazadas.

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