Publicaciones especializadas sugieren evitar maquillajes que contengan sustancias como petrolato, grasas animales o minerales, que en algún momento determinado pueden obstruir el buen funcionamiento de los conductos del folículo pilosos o pilo-sebáceos de la piel, que son pequeñas formaciones anatómica en forma de bolsa. Lo anterior, a fin de minimizar el riesgo de que se presenten problemas en la piel u ojos, como conjuntivitis, dermatitis, blefaritis, esto es, inflamación del tejido de los párpados, así como los molestos barros y espinillas, y en algunas ocasiones la aparición de aftas en los labios.
Los expertos aconsejan utilizar un buen maquillaje que sea hipo alergénico, es decir, que no contenga elementos grasos ni metales en su composición, y algo muy importante es la renovación del maquillaje cada tres meses para evitar que se contamine con bacterias, las cuales pueden crear un proceso infeccioso recurrente en la piel.
El cuidado diario de limpieza del rostro al desmaquillarse es vital, si tienes cutis seco usa una base cremosa no grasosa para quitar el maquillaje, si tu cutis es mixto utiliza una gel, posteriormente lava tu cara con agua y jabón neutro para asegurar una limpieza profunda; finalmente aplica una crema hidratante.
Evita contaminaciones en tu maquillaje:
1.- Revisa la caducidad.
2.- Cierra bien los productos después de usarlos.
3.- Considera los productos con los que te maquillas estrictamente de uso personal, evita compartirlos.
En caso de cualquier infección o inflamación de tu piel consulta con el Médico.
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