Ive been willing to start doing yoga for ages, and now that at last Ive done it I cant be more happy. Here are my reasons for you to start too.
Aunque la mayoría de la gente asocia el yoga al relax y a la tranquilidad, lo cierto es que esta disciplina aporta muchas más cosas que estoy comprobando por mí misma. Llevo un mes yendo a clase una vez a la semana (alternando el Kundalini Yoga, que es digamos más espiritual y enfocado a la mente, con posturas mantenidas o de movimientos más lentos, y el Hatha Yoga, que en mi opinión es más físico y yo diría que hasta más optimista) y esto es lo que estoy experimentando:
-Aprendo a respirar. En el yoga la respiración y su control son fundamentales. Hay que respirar conscientemente, de manera lenta y suave, vigilando cómo el abdomen se mueve con cada inspiración y exhalación. Al realizar las posturas o asanas, se está muy pendiente de cómo estamos respirando. Esto es muy bueno para que el oxígeno llegue bien a nuestros pulmones y cerebro y para aprender a respirar bien en nuestra vida cotidiana.
-Aprendo a relajarme cuando lo necesito. Con el control de la respiración controlamos también nuestros niveles de estrés, así que cuando me pongo más nerviosa de lo normal (que es a menudo aunque nadie lo diría porque aparento ser la persona más tranquila de la Tierra) sólo tengo que empezar a respirar conscientemente unas cuantas veces de manera profunda, aguantando la respiración unos segundos después de cada inspiración, y es mano de santo.
-Aprendo a controlar mi cuerpo. Los movimientos del Kundalini Yoga y las posturas del Hatha Yoga me hacen ser consciente de cómo coloco las piernas, las manos, los pies, la espalda... y eso hace que controle mejor mi cuerpo a la hora de moverme, evitando malas posturas y lesiones.
-Aprendo a mejorar mi postura. Esto, que está relacionado con lo anterior, lo he notado mucho. Como tengo hiperlordosis y suelo arquear la parte baja de la espalda sin darme cuenta, ahora soy mucho más consciente de ello y he aprendido a darme cuenta cuando me pasa para corregir la postura.
-Aprendo a no compararme con los demás. No lo puedo evitar, soy muy competitiva. Siempre he querido ser la mejor en todo lo que hago (en las notas, en el deporte, en el Trivial...), cosa que es buena para superarse cada día, pero a veces hay que darse un respiro. Y con el yoga no importa si no llegas a hacer las posturas que tocan, o si no tienes la flexibilidad suficiente. Todo se hace con tranquilidad, sin importar si quien está en la esterilla de al lado es un experto o un principiante como tú. Te liberas de presiones y aceptas tus limitaciones. Y sin darte cuenta vas mejorando poco a poco. Me encanta.
Además, está demostrado que el yoga mejora la figura gracias a las posturas y los movimientos que se hacen. Algunas de ellas son exigentes para los músculos, os lo aseguro. Yo que hago mucho HIIT y mucho bodyweight no veais cómo sufro con algunas... ;)
En fin, que si estáis pensando en empezar a hacer yoga os animo a que no lo dudéis ni un segundo. Buscad un centro que os convenza (yo hice una pequeña investigación por los que hay en Granada hasta que elegí el mío) y daos la oportunidad de mejorar vuestro interior y vuestro exterior. Lo vais a notar desde el primer día, pero daros varios para dejar de sentiros algo fuera de lugar, que es posible que os pase las primeras veces. Yo hasta salgo de buen humor de mis sesiones. ¿Qué más se puede pedir?
¿Hacéis yoga o estáis pensando en hacerlo? ¿Qué disciplina os gusta más?
Fuente: este post proviene de Fitness & Chicness, donde puedes consultar el contenido original.
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