Gracias a la Diálisis Peritoneal domiciliaria, una modalidad de tratamiento renal sustitutivo que puede realizase en cualquier momento del día en el domicilio, muchos pacientes se pueden desplazar con autonomía e independencia, sin necesidad de acudir a ningún hospital a dializarse varias veces por semana.
En España, solo el 5% de los pacientes renales, de los 24.000 enfermos que existen, se beneficia de la diálisis peritoneal en domicilio. Se trata de uno de los porcentajes más bajos de implantación en toda Europa
Pero viajar no es la única libertad que ofrece el tratamiento de Diálisis Peritoneal domiciliaria. Dado que es el paciente quien controla el tratamiento, puede confeccionar un horario que se ajuste a su estilo de vida durante todo el año. Esto le permite tener una vida laboral y social activa.
Además, según el Grupo de Apoyo al Desarrollo de la Diálisis Peritoneal en España (GADDPE) “como la diálisis peritoneal es capaz de mantener mejor la función residual de los riñones de los pacientes que tienen que comenzar tratamiento, es una modalidad óptima para los que posteriormente puedan ser candidatos a un trasplante”.
Por este motivo, la diálisis peritoneal también se considera una excelente opción de tratamiento inicial de diálisis. Asimismo, cabe destacar que al realizarse de manera continua es la que más se acerca al normal funcionamiento de los riñones, es muy fisiológica y tiene muy buena tolerancia, lo que también ofrece claros beneficios.
La Diálisis Peritoneal es una modalidad de tratamiento sustitutivo renal domiciliaria utilizada en pacientes con insuficiencia renal crónica. La eliminación de sustancias tóxicas, con la diálisis peritoneal, se realiza a través de la membrana peritoneal y se puede llevar a cabo de forma manual o automatizada, durante la noche, mientras se duerme. El paciente solo acude al hospital para revisión cada uno o dos meses.