Una de las ventajas de tener un blog es que todo aquello que escribo en él, sobretodo en lo referente a cuestiones de Bienestar, aparte de intentar aplicarlo en mi día a día hace que me comprometa conmigo misma a ser constante y a cumplir con todo aquello que me pongo como objetivo. No sería creíble que os contara lo bueno que es hacer deporte - aprovecho y os cuento que voy a por mi quinta media maratón, esta vez en Zaragoza el próximo diez de mayo, podéis aplaudirme o echaros las manos a la cabeza - o tomar porridge de avena por las mañanas para desayunar si yo misma no lo hiciera y al tenerlo escrito por aquí y permitir que cualquier persona pueda leerlo, hace que me obligue a cumplirlo. De alguna manera podéis sentiros como parte importante de mi motivación y os doy las gracias por ello, de verdad de la buena.
¿Qué por qué os quiero hablar del Mindfulness? Porque en este aspecto me quiero aplicar el cuento y es que últimamente entre el trabajo, los entrenamientos, el blog, la tienda on-line (le podéis echar un ojillo ¿eh?) e intentar cuadrar todo eso con el resto de mi vida personal me está costando un mundo centrarme en todas y cada una de esas cosas al cien por cien y eso, al final, acaba pasando factura de ahí que me interese poner en práctica esta práctica de origen budista que cuenta con más de 2.500 años de antigüedad y que después de todo ese tiempo, toda una eternidad, se ha vuelto a poner de moda.
¿En qué consiste esto del Mindfulness? Jon Kabat fue quién introdujo el concepto en Occidente hace algo más de treinta años y lo definió como "prestar atención de manera intencionada al momento presente". ¿Qué nos quiere decir Jon con esto? Sencillamente que debemos concentrarnos en una sola tarea cada vez, que estar a varias cosas al mismo tiempo no es nada bueno para nuestro cerebro ya que acaba causándonos estrés, ansiedad e incluso dolor físico que nos podríamos ahorrar si le hiciésemos un poquito de caso. El Mindfulness o estado de atención consciente nos ayuda a incrementar la creatividad, aumentar la resistencia emocional, tener una mayor claridad a la hora de tomar decisiones y a disfrutar del momento presente.
¿Es posible entrenar nuestra capacidad de atención? La buena noticia es que si. La mala es que no es algo que se consiga de hoy para mañana porque requiere de entrenamiento constante para ver resultados con el tiempo.
¿Como entrenar nuestra capacidad de atención? A continuación os cuento algunos de los ejercicios que podemos hacer para aumentar nuestra capacidad de atención, lo ideal sería dedicarles entre 15 o 20 minutos cada día pero esto ya depende del que disponga cada uno, yo con hacerlo un par de veces por semana creo que tengo más que suficiente.
Colorear: recordad cuando os hablé del Colouring y los libros para colorear no hace mucho como un nuevo método de terapia anti estrés, y es que esta actividad que está al alcance de todos, nos ayuda a fomentar nuestra creatividad y a concentrarnos en una única tarea.
Respiración: Respirar tomando consciencia de como lo hacemos y apartando de nuestra mente cualquier otro pensamiento que tengamos en la cabeza ayuda a focalizar la atención.
La pasa: En los talleres de Mindfulness en uno de los ejercicios estrella y para no irme demasiado por las ramas os dejo enlazada una entrada de un blog en el que explica como hacerlo. Os sorprenderéis lo que da de si una pasa, yo misma he hecho este ejercicio y os aseguro que la sensación de tranquilidad posterior es brutal.
Corred, coged una pasa y empezar a integrar el Mindfulness en vuestra vida, yo desde aquí me comprometo con vosotros a hacerlo
¿Sabíais en que consiste el Mindfulness?
¿Estáis dispuestos a aplicarlo en vuestro día a día?
Para más información puedes consultar mi perfil de Google+ de Blanca Cabrerizo o contactar conmigo en theblancheblog@gmail.com
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