Es cierto que no de puede estar en todos sitios, pero por algo se nos abre la ventana a ciertas experiencias y no otras.
?será común tener este miedo? Que no es en realidad un miedo a algo en concreto, sino un miedo a la pérdida. Un miedo a algo que no tener algo que no se tiene. Es un miedo a no vivir las experiencias potenciales, un miedo a no vivir al máximo. Es un miedo increíble. Un miedo distinto a los demás: no paraliza sino por el contrario mueve.
?deberíamos vivir un poco con ese ímpetu por saborear cada oportunidad que se nos presenta? Con esa consciencia de que cada momento es único, que cada experiencia puede darnos más de lo que aparenta. Que la vida pasa queramos o no y solo podemos participar o resistirnos.
Creo que la mejor actitud ante la vida es la de un libro abierto. Abiertos a recibir. Abiertos a que las cosas sucedan y no necesariamente nos sucedan pero que fluyan mientras las vemos tal cual son, mientras decidimos si queremos participar o no. Pero cuando veamos una buena oportunidad no las dejemos pasar, que no perdamos el fear of missing out, el miedo a perdernos de la vida, el miedo de olvidar quienes somos, miedo a olvidar de qué se trata la vida, miedo de tratar mal a nuestros seres queridos, miedo a no ser mejor cada día, miedo a no aprender a ser feliz. Miedo a olvidarse cómo sonreír.