El mercurio es un metal que en grandes cantidades puede causar problemas en el cerebro en el desarrollo de bebés y niños, y problemas en el aprendizaje. Por ello, se aconseja consumir pescado con poco nivel de mercurio a mujeres embarazadas, lactantes y niños.
El Departamento de Salud y Salud Mental de la Ciudad de Nueva York ha publicado una completa guía llamada "Coma pescado, elija sabiamente ? Protéjase del mercurio" en la que recomienda a mujeres embarazadas, mujeres que estén dando el pecho y niños qué tipo de pescado es el más aconsejable para ingerir y cuál se debe evitar en base a su concentración de mercurio.
El pescado es rico en proteínas y nutrientes y bajo en calorías, aunque a veces puede contener mercurio. La mayoría de las personas pueden comer pescado sin preocuparse por el mercurio, pero las mujeres embarazadas o que estén amamantando y los niños deberían controlar qué tipo de pescado pueden comer y cuál es mejor evitar.
Durante el embarazo, el mercurio puede pasar de la madre al bebé. En cantidades más pequeñas puede también pasar a la leche materna. El mercurio puede afectar al cerebro en desarrollo y causar problemas de aprendizaje en los niños. La mayoría de los bebés cuyas madres comen pescado durante el embarazo nacen sanos y se desarrollan saludablemente, pero cuanto menos expuesto esté un niño al mercurio mejor.
La mayoría de pescados contiene algo de mercurio, pero algunos contienen altas cantidades. Los pescados más grandes y aquellos que se alimentan de otros peces suelen tener más mercurio. De esta manera, el consumo de mercurio de las personas dependerá del tipo de pescado que coman y con qué regularidad.