El conocido como “blue monday” es el peor día y el más triste de todo el año. Hoy, lunes 16 de enero es el tercer lunes del primer mes del año y, de acuerdo con los cálculos matemáticos de los expertos (sic), resulta que es el día en que la tristeza llega a su punto máximo. Los psicólogos y psiquiatras, sin embargo, invitan a mirar las cosas desde una perspectiva diferente, y os ayudan a ver no solo la parte negativa sino también a mejorar esta sensación de melancolía.
Pero, ¿porqué aparece esta tristeza? Se dice que además del clima, el hecho de que este sea el día más triste del año también se debe a los gastos acumulados durante las fiestas de Navidad, la falta de dinero esperando la próxima paga, la realización de los propósitos para el año de nuevo… Pero hoy en día se pretende dar importancia a esta sensación de tristeza y sacarle provecho. La idea principal es que re-evaluemos este sentimiento de tristeza y sepamos afrontarlo aunque aparezca. Eso sí, deberíamos diferenciar entre depresión y tristeza estacional u ocasional.
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¿Cómo nace el “Blue Monday”? Cliff Arnall fue el primero en hablarnos de este término a principios del 2000. Se trata de un psicólogo de la Universidad de Cardiff que a través de una ecuación complicada (que tiene en cuenta una serie de variables tales como el clima, el sentimiento de culpa por el dinero gastado en la Navidad, la disminución de la motivación después de las fiestas y la creciente necesidad de ponerse a trabajar), calculó que este era el día más triste del año. En Gran Bretaña, por ejemplo, se toman tan en serio este día que aumenta el número de ausencias del trabajo durante el tercer lunes de enero.
¿Qué podemos hacer para hacerle frente?
Algunos consejos prácticos para que el tercer lunes de enero sea más llevadero los sugiere la psicoterapeuta Paola Vinciguerra, presidenta de la Asociación Europea de trastornos de ataques de pánico (Eurodap). Veamos cuáles son estos consejos básicos a seguir:
1- Sacar tiempo para dedicar a la actividad física. Hacer deporte estimula la producción de endorfinas que contribuyen al bienestar psicológico.
2- Seguir una dieta saludable que nos permite disponer de la energía adecuada; ser flexible y elegir los objetivos, no utópico, que se persiga.
3 – Darse pequeñas auto-recompensas después del ajetreado día de trabajo.
4 – Tratar de “vivir el momento” saboreando cada momento. Lo que conocemos como carpe diem.
5 – Y, por último, la psicoterapeuta añade: debemos intentar pasar tiempo con amigos y familiares. Y hacerlo sin máscaras ni falsedad. No hay que hacerse el exitoso ni temer comunicar las decepciones o dificultades. Aprendamos a ser tal como somos con aquellos que nos quieren. “Necesitamos ser más reales”
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