Correr siempre se ha considerado como una actividad deportiva excelente para quemar calorías, reducir el estrés y mantener un bajo índice graso. Sin embargo en los últimos años el running se ha convertido en una moda, en la actividad favorita de todos aquellos que buscan ejercitar su cuerpo y conseguir un estilo de vida más sano. Se trata de una disciplina llena de aportes positivos para nuestra salud, sin embargo es importante saber en qué casos debemos evitar practicarla con el fin de prevenir molestas y dolorosas lesiones.
En qué casos no debemos correr
Como cualquier otra actividad de alto impacto, correr no es para todos. Hay casos en los que conviene evitarlo con el fin de prevenir daños a nuestra salud, algunos de ellos son:
Si eres obeso o padeces de sobrepeso, el impacto sobre tus articulaciones sería muy grande y acabarías lesionándote en pocos meses o semanas. Conviene optar por otras prácticas cardiovasculares como la elíptica, la bicicleta o caminar a paso acelerado.
Quienes sufren problemas cardíacos no deben correr sin supervisión médica.
Personas con lesiones en las rodillas, tobillos o cualquier otra articulación que no deban practicar ejercicios de alto impacto.
Si tienes alguna lesión en el pie como fascitis plantar, espolón o tendinitis.
Además si eres una persona sedentaria y fuera de forma que no practica ejercicio físico con frecuencia no es conveniente comenzar a correr hasta que no estés un poco más preparado, pues podrías aumentar la posibilidad de sufrir daño cardíaco y lesiones musculares.
Correr fortalece tus huesos
Uno de los beneficios de correr más importantes para quienes están preparados para hacerlo es el fortalecimiento de los huesos, aumentando la densidad ósea y ayudando a prevenir condiciones como la osteoporosis, las fisuras y fracturas. Además esta actividad física, al igual que muchas prácticas de intensidad alta y media, ayudan al fortalecimiento y regeneración muscular, retardando la degeneración asociada con el envejecimiento.
Mejora la resistencia física y te relaja
Correr con frecuencia es una excelente actividad para mejorar nuestra resistencia física, ayudándonos a respirar de forma correcta y a poder resistir de forma adecuada la práctica de actividades cardiovasculares.
Además, y al igual que muchas actividades físicas, se trata de una práctica ideal para liberar tensiones, haciéndonos sentir mucho más relajados y positivos. Es la actividad perfecta para quienes llevan una vida tensa y buscan aumentar y mejorar su salud.
Correr reduce los dolores de cabeza
Al liberar tensiones, reducir la carga de estrés y mejorar la circulación sanguínea, uno de los beneficios de correr más destacados es la reducción de los dolores de cabeza, un aporte de esta actividad que fue descubierto por la Universidad de Gotemburgo en Suecia. Tras un estudio esta institución determinó que basta con correr 3 veces a la semana durante 40 minutos para que quienes sufren de migraña tengan menos episodios de dolor y molestia que aquellos que no realizan actividad física.
Te ayuda a prevenir el cáncer y a estar saludable
El ejercicio es básico para estar saludables pues nos ayuda a prevenir condiciones como la obesidad y el sobrepeso, el colesterol y triglicéridos altos, la tensión elevada, además de beneficiar a nuestra mente y emociones.
Sabemos que correr o ejercitarnos es bueno para nuestra salud, pero un estudio realizado a lo largo de 17 años usando a 2.560 individuos como muestra reveló que quienes se ejercitan con frecuencia y corren varias veces a la semana tienen menos posibilidad de morir de cáncer que quienes no lo hacen. El cáncer de pulmón y de intestino fueron los de menor incidencia en este grupo.
Mejora tu salud cardíaca y tu circulación
El hecho de que correr ayuda a nuestro corazón a estar más sano no es una casualidad. Esta actividad cardiovascular mejora la circulación sanguínea ayudando a bombear sangre a este órgano de forma efectiva, reduciendo la acumulación de placas de grasa en las arterias, bajando los niveles de la presión sanguínea y haciendo que tengamos un corazón más sano.
Una buena circulación a su vez ayuda a evitar problemas como las varices, las piernas cansadas o la dificultad para conseguir erecciones en el caso de los chicos.
Nos ayuda a estar en forma
Correr requiere de una gran inversión de energía y de una buena resistencia, es por esto que se trata de una excelente actividad para ayudarnos a estar en forma al quemar calorías de manera efectiva, reduciendo los niveles de grasa y azúcar en nuestro cuerpo y permitiéndonos estar en forma.
Beneficia nuestra autoestima
Otro de los beneficios de correr que está presente en las actividades físicas en general, es la liberación de endorfinas un grupo de neurotransmisores que aumentan nuestra sensación de bienestar, haciéndonos sentir más positivos, dispuestos y contentos con nosotros mismos. Practicar deporte con frecuencia mejora nuestra autoestima y seguridad, lo que nos ayuda a enfrentar nuestras tareas cotidianas de forma mucho más positiva.
Los beneficios de correr son claros, tratándose de una actividad ideal para mejorar la salud de nuestro cuerpo y mente, sin embargo recuerda que es importante hacerlo solo si tienes la condición física adecuada. Si durante la práctica sientes molestias articulares, musculares, óseas o dificultad para respirar, suspende la actividad y consulta a tu médico.
Fuente: UnComo