Resiliencia... y esto qué es

resiliencia


Muchos habremos oído hablar de la resiliencia, una de esas palabrejas, como denomino yo a los términos técnicos de los que tanto intento huir en alguna ocasión que otra. Otros quizás es la primera vez que la leemos y no sabemos absolutamente nada de lo que se refiere. Sea como sea, lo cierto es que es una capacidad que algunas personas tienen para enfrentarse a la adversidad y salir fortalecidos de la experiencia. Te amplio el concepto a continuación.

resiliencia

¿Qué significa ser resiliente?

La resiliencia es esa capacidad que tiene una persona para superar, adaptarse y salir reforzado de circunstancias adversas, incluso traumáticas, como la muerte de un ser querido, un accidente, un cambio de domicilio, de colegio o cualquier otra situación que conlleve una pérdida del tipo que sea.

Diferentes experiencias e investigaciones han mostrado que algunos niños, niñas y adolescentes resisten mejor que otros los avatares de la vida, la adversidad, la enfermedad e incluso contextos tan dañinos como la pobreza o los malos tratos.

Este fenómeno es lo que actualmente se conoce como resiliencia, es decir, la capacidad de una persona o grupo para desarrollarse bien, para seguir proyectándose en el futuro, a pesar de los acontecimientos desestabilizadores, de condiciones de vida difíciles y de traumas a veces graves (Manciaux, M., Vanistendael, S., Lecomte, J. y Cyrulnik, B., 2003).

El desarrollo de esta capacidad está estrechamente ligado a factores que tienen que ver con la interacción del niño o niña con personas significativas de su entorno. Pero también a sus características individuales, o lo que podríamos decir a su personalidad, su forma de ser, su modo de captar el mundo y su particular manera de procesar la información que recibe de él.

Ser resiliente es ser capaz de sobreponerse a las circunstancias desfavorables que la vida nos depara. Es la capacidad de transformarse a partir de estas experiencias y sacar de ellas algo positivo.

Factores qué influyen en la resiliencia

Tal y como habrás podido intuir existen diversos factores que influyen en la capacidad de ser más o menos resiliente. Destacamos:

Entorno social y cultura donde se nace y se desarrolla el niño.

El tipo de familia concreta y su estilo educativo.

La personalidad del pequeño.
La resiliencia es una actitud y una capacidad para hacer frente a la adversidad; es, por tanto, un potencial de esperanza que facilita recursos para recuperarse de situaciones difíciles e incluso traumáticas. En el caso de los niños y niñas, es posible generarla cuando en su entorno encuentran adultos que les entregan afectividad y posibilidades de encontrar nuevo sentido a su experiencia.


Post relacionado: 10 consejos para desarrollar la resiliencia en niños y adolescentes


Una metáfora para explicar la resiliencia

Circula por internet una metáfora que me ha encantado y que te dejo a continuación que ilustra a la perfección el significado del concepto que hoy nos ocupa. Ana Forés y Jordi Gravé, pedagogos catalanes, la mencionan en su libro La resiliencia. Crecer desde la adversidad

Una hija estaba muy molesta porque parecía que, cuando un contratiempo se le solucionaba, aparecía un problema nuevo aún más complicado. Habló de ello con su padre, que era jefe de cocina. La miró y, sonriente, cogió tres ollas.

En un puchero puso unos huevos; en otro, unas zanahorias, y en una tercera ollita, café. La joven se quedó pasmada pensando que su padre no la escuchaba, como ya era habitual, porque en lugar de proporcionarle una respuesta se ponía a cocinar.

Después de veinte minutos de cocción, el padre le preguntó a la hija. ¿Qué ves? La chica quedó atónita. ¡¿Qué quieres que vea?! ¡Como no me haces ningún ca so mientras cueces huevos y unas zanahorias y haces café…!, respondió, medio enfadada.

El padre, imperturbable, la invitó a palpar los tres ingredientes. La joven, azorada, le preguntó qué quería decir. Él le respondió: Los huevos eran frágiles antes de la cocción, y ante la adversidad (el calentamiento con el fuego) se han vuelto duros; las zanahorias, en cambio, eran duras y con el fuego se han vuelto blandas; en cambio, el café, cuando se ha calentado ha sido incluso capaz de poder transformar su contexto: el café ha transformado el agua.

¿Qué deseas ser tú, hija mía, ante las adversidades? Ojalá seas como el café y, cuando aparezcan los problemas o las adversidades, seas capaz de ser fuerte sin dejarte vencer ni aislarte, salir airosa e, incluso, mejorar tú misma logrando cambiar tu entorno.


Fuente consultada: La fiesta mágica y realista de la resiliencia infantil. Manual de técnicas terapéuticas para apoyar y promover la resiliencia de los niños, niñas y adolescentes. Jorge Barudy y Maryorie Dantagman.


No olvides compartir este post entre tus redes sociales para que pueda llegar a muchas más personas que se interesan por este concepto.

Fuente: este post proviene de Mamá psicóloga Infantil, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?
Esta información nunca debe sustituir a la opinión de un médico. Ante cualquier duda, consulta con profesionales.

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Recomendamos