Más de 600.000 personas sufren problemas de audición en nuestro país. A pesar de utilizar ayudas auditivas, éstas no pueden disfrutar del sonido correctamente en espacios como teatros o cines. En concreto, el 90% de los espacios públicos en España no se encuentran adaptados correctamente según GAES Centros Auditivos.
Una de las soluciones a este problema son los bucles de inducción, una sencilla técnica que permite que el sonido del espacio en el que se encuentra la persona llegue correctamente al audífono y por tanto al individuo que lo utiliza. A pesar de que estos sistemas de accesibilidad mejoran la comunicación de los usuarios de audífonos, menos del 10% de los espacios públicos cuentan con esta tecnología en España.
A nivel europeo son Inglaterra y Suecia los países que están a la cabeza de la integración de estos sistemas de accesibilidad, ya que hace más de 10 años que están trabajando por adaptar todos los espacios. Una asignatura todavía pendiente para España, donde sólo un 10% del total cumple esta normativa lo que se traduce en que el nivel de accesibilidad es muy bajo, según el estudio realizado por GAES.
Actualmente espacios públicos como el Auditorio Sant Andreu (Barcelona), la Sociedad Española de Otorrinolaringología (Madrid), el Auditorio de la Caja (Guadalajara) y los Centros Cívicos de los Ayuntamientos de Sevilla y Tenerife ya están completamente adaptados.
Según Pablo Kessler, responsable del área de Accesibilidad de GAES, “a partir de 2010 los nuevos edificios que se construyan deberían cumplir ya con las normas de accesibilidad, que contemplan la instalación de bucles inductivos en los espacios públicos, pero lamentablemente no todos se están edificando así”. Pablo Kessler explica “que el coste económico no es elevado”.
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