El aceite esencial de lavanda se obtiene de la Lavandula angustifolia, una planta de la familia Labiatae. Este aceite esencial extraído de planta de lavanda ejerce una acción de reequilibrio del sistema nervioso central, siendo al mismo tiempo tónico y sedante; calma la ansiedad, agitación y nerviosismo; alivia los dolores de cabeza y trastornos causados por el estrés; ayuda a conciliar el sueño en caso de insomnio…
Actúa también como antiséptico y antibiótico y sirve de ayuda en el tratamiento de los resfriados: gripe, tos, sinusitis, catarro. Podéis ver cómo hacer un desinfectante casero en el siguiente artículo: Prepara tu propio desinfectante de manos.
Otra de sus cualidades es que es un buen antiespasmódico, es decir, ayuda a calmar el dolor abdominal y espasmos y eso lo hace beneficioso en casos de dolor menstrual (aunque hay que evitarlo en el caso de tener menstruaciones abundantes).
Como antiséptico puede diluirse junto con el gel íntimo para contrarrestar las afecciones del aparato genitourinario, tales como la cistitis.
Su poder anti-inflamatorio y analgésico lo convierte en un buen aceite para aliviar el dolor causado por las torceduras musculares y reumatismo y ayuda al estancamiento linfático causado por la presencia de la celulitis.
Si se aplica sobre la piel, incluso la piel de los niños,es un buen cicatrizante que puede usarse para las quemaduras, llagas, heridas, quemaduras solares, irritaciones causadas por medusas…incluso puede aliviar picaduras de mosquito.
Cuando los bebés tienen trastornos de la infancia como cólicos, irritabilidad, agitación nocturna, resfriados, pueden ser aliviados haciendo un masaje en el cuello o el pecho con aceite esencial de lavanda, o con unas gotas en su almohada o en el agua los humidificadores.
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¿Cómo puede usarse el aceite esencial de lavanda?
Difusión en el medio ambiente: se necesita 1 gota del aceite esencial de lavanda para cada metro cuadrado del entorno en el que se propagará a través del quemador de madera o en el agua de los humidificadores de radiador para aliviar dolores de cabeza, tensión nerviosa, estrés, insomnio…
Baño tonificante: se deben poner 10 gotas en el agua del baño, emulsionar agitando bien fuerte el agua y luego ponerse en remojo durante 10 minutos para poder beneficiarse de la acción descongestionante para el sistema muscular y el dolor reumático y articulares.
Aplicación local: 1 o 2 gotas de aceite esencial de lavanda diluidas en un poco de aceite de almendras dulces son suficientes para realizar un masaje en el abdomen de los niños en caso de cólicos, para aliviar las picaduras de insectos y para quemaduras menores.
Contraindicaciones del aceite esencial de lavanda
El aceite esencial de lavanda se considera seguro, así que no hay precauciones especiales que se deban seguir.
Es importante recordar que el uso indebido de los aceites esenciales también pueden ser perjudiciales.
Curiosidad
El químico francés René Maurice Gattefosse, a quien se le atribuyó la invención del término “aromaterapia” en 1928, y que contribuyó al resurgimiento del uso de aceites esenciales con fines terapéuticos señaló que el aceite esencial de lavanda, que él estaba usando para hacer mezclas de perfume, tenía una notable capacidad para curar las heridas de quemaduras.
De hecho, mientras trabajaba en un perfume que estaba haciendo para usar en aromaterapia se quemó accidentalmente el brazo y lo metió en el líquido de reacción más cercano a él. Dio la casualidad de que el líquido era sólo aceite esencial de lavanda que le hizo sanar después de la quemadura muy rápidamente. Menos mal que el recipiente no contenía ningún ácido…
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Fuente: este post proviene de Infografías de Salud, donde puedes consultar el contenido original.
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