La dieta mediterránea es una de las más saludables que existen, una referencia en todo el mundo en cuanto a sabor y beneficios nutricionales, en la que las frutas y las verduras juegan un papel de vital importancia. Por ello, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente lleva a cabo estos días, del 13 al 19
de octubre, la Semana de la Fruta y Verdura en la Dieta Mediterránea.Esta campaña tiene dos objetivos principales: respetar un calendario de frutas y verduras que nos permita aprovechar cada pieza en su temporada, y a un menor precio; y dar así prioridad a las frutas y verduras nacionales, ya que comprándolas fuera de temporada muy probablemente vengan de Sudamérica o África. Lo ideal es consumir cada fruta en su mejor momento, para tomarlas con todo su sabor, y no comprar de más, porque así evitaremos que se pasen y haya quetirarlas a la basura.
La dieta mediterránea, declarada Patrimonio del Mundo por la Unesco, podemos sintetizarla en cinco tipos de alimento básicos:
Frutas y verduras: Lo ideal es tomar cinco raciones de fruta y verdura al día: tres de fruta y dos de verduras, preferiblemente de temporada. También son ideales para completar otros platos, sobre todo las verduras.
Aceite de oliva: Es cardiosaludable y contiene antioxidantes.
Cereales, patatas y legumbres: Son ricos en hidratos de carbono complejos. Lo ideal es que el 55% del aporte calórico de la dieta provenga de ellos.
Carnes y pescados: Basta con tomarlos una vez al día. Hay que alternar la carne roja, aves, pescado (sin olvidarnos del pescado azul) y los huevos.
Lácteos: Aunque en los últimos años ha surgido una corriente contra ellos, son fundamentales si se quiere seguir una dieta mediterránea.Las piezas de fruta pueden repartirse entre el desayuno, la hora del almuerzo y la de la merienda, y son una buena solución cuando entra el gusanillo: en lugar de tirar de un bollo o algo dulce, una pieza de fruta quita el hambre y es una opción saludable. Las frutas aportan al organismo vitaminas, minerales y fibra.
Las principales frutas de temporada en otoño -sobre todo a finales- sonlos cítricos, especialmente las mandarinas, muy ricas en vitamina C y con pocas calorías. En cuanto a las verduras, otoño es el mejor momento para comprar calabazas, coles y judías verdes.
Para acompañar a estas frutas y verduras, lo mejor es el agua,aunque tomar un poco de vino -sin excederse- también es una buena opción.