Continuando con lo explicado en la nota pasada, retomaremos los dos fundamentos principales por los que se utilizan estas herramientas:
¿Cuál es el fundamento de esta herramienta?
Este tipo de masaje puede usarse para:1. Aliviar los efectos adversos de puntos gatillo (áreas en el musculo sensibles y dolorosas a la palpación, comúnmente denominados “nudo”) activos o latentes.
2. Influenciar un sector específico del sistema nervioso, el sistema autónomo el cual se encarga de regular la frecuencia cardiaca, la tensión arterial, la tensión muscular etc.
La presión externa causada por el peso del cuerpo sobre el rodillo o la pelota estimula los receptores localizados a lo largo del tejido corporal lo cual termina produciendo “inhibición autogénica” (inhibición muscular por sus propios receptores). Según diversos estudios, se informó que mantener la presión del rodillo o pelota sobre un área muscular sensible y dolorosa (“nudo”) al máximo nivel de tolerancia al dolor por corta duración (30 segundos) o a baja intensidad, por una mayor duración (90 segundos), redujo significativamente el dolor y la sensibilidad de estos “nudos”. Más aun, cuando se aplica este masaje y posteriormente se realizan técnicas de elongación, aumenta significativamente el rango de movimiento.
Máximo nivel de tolerancia x Corta duración = Reducción del dolor
Mínimo nivel de tolerancia x Larga duración = Reducción del dolor
El significado práctico es que al mantener la presión sobre estos “nudos musculares” por un periodo establecido, la actividad de los mismos puede ser disminuido. Esto permitirá luego la aplicación de técnicas de elongación, que a su vez, facilitarán el aumento de la extensibilidad muscular de los músculos acortados y la optimización de distintos rangos de movimiento.
La estimulación sobre los receptores que se encuentran en el tejido del cuerpo también influencia al sistema nervioso autónomo causando cambios en la frecuencia cardiaca, la presión sanguínea y la respiración como así también sobre el tono simpático produciendo, en conjunto, una reducción en el tono muscular, vasodilatación arterial, etc.
En conclusión, la presión sostenida o de baja intensidad estimula los receptores, estos envían información al sistema nervioso central y al autónomo. En respuesta, el sistema nervioso central cambia el tono muscular (o disminuye su hipertonicidad). La respuesta del sistema nervioso autónomo también cambia el tono muscular global como así también la dinámica de los fluidos.
Como se ve, ambas respuestas permiten una mejora en la extensibilidad de los tejidos. Y si, además, combinamos este masaje con las técnicas de elongación, potenciaremos el efecto beneficioso sobre la movilidad del cuerpo.
Artículo redactado por Kine Box para Revista 21-15-9