El ayuno presenta importantes beneficios para el organismo.
Se sabe desde siempre que el ayuno puede llegar a ser muy efectivo con el propósito de eliminar las toxinas que se van acumulando en el cuerpo. Además, permite fortificar las defensas y revitalizar al organismo luego del proceso. Más allá de esto, un efecto secundario del ayuno siempre será la pérdida de peso, en una magnitud que irá variando a partir del tipo de metabolismo que posee cada persona.
Ya sea en el caso de un ayuno total o de uno parcial, las consecuencias indicadas previamente constituyen las condiciones básicas de esta práctica. Sin embargo, es posible profundizar en ciertos aspectos relativos al ayuno, que nos marcarán una serie de puntos positivos y otros negativos. Como siempre, la decisión final corre por cuenta de cada persona y tiene que ver con sus necesidades y características individuales.
El ayuno puede ser muy eficaz para bajar de peso.
VENTAJAS DEL AYUNO
Entre las ventajas más trascendentes del ayuno podemos mencionar las siguientes:
Actúa inmediatamente sobre las reservas de grasa, reduciéndolas directamente porque el organismo hace uso del tejido adiposo al no recibir alimentación. Junto a la lógica pérdida de peso, se produce la eliminación de impurezas y toxinas que formaban parte de las grasas acumuladas. En consecuencia, los beneficios para la salud van más allá de la pérdida de peso.
Se reduce el colesterol negativo y se genera un descenso en la tensión arterial.
Se incrementan y potencian las defensas del organismo.
Disminuyen las cefaleas y los dolores de cabeza.
Si la persona posee inconvenientes hepáticos, puede producirse un mejoramiento de su cuadro.
Se reducen inflamaciones, sobretodo en el área renal y en la vejiga.
Tiene un efecto positivo sobre el reuma.
Más allá de sus ventajas, el ayuno también puede generar consecuencias negativas sobre el cuerpo humano.
DESVENTAJAS DEL AYUNO
Por otro lado, el ayuno también posee efectos negativos sobre el cuerpo, que no podemos dejar de lado antes de decidirnos a practicarlo. Los más importantes son:
Se produce un descenso en la temperatura corporal o hipotermia, debido a la reducción en la intensidad del metabolismo. Este fenómeno se advierte principalmente en las extremidades.
Se genera una sensación de cansancio y la energía decae, produciéndose mareos. La causa principal es el gasto extra de energía que debe realizar el cuerpo al no recibir alimentos y procurar obtener su combustible en el tejido adiposo.
Los cuadros de hipotensión arterial son otra posible consecuencia negativa de los ayunos. Como dijimos anteriormente, se genera una reducción en la tensión arterial que en principio puede ser positiva, pero cuando atraviesa ciertos límites llega a volverse una situación peligrosa para la salud de la persona.
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