¿Qué es un medidor continuo de glucosa?
Un MCG es un dispositivo que mide la glucosa cada cinco minutos durante las 24 horas del día dando como resultado 288 mediciones. Este consta de un sensor, insertado de manera subcutánea bajo la piel y que mide la glucemia en el líquido intersticial; un transmisor que recibe las glucosas del sensor y un receptor inalámbrico que muestra el nivel de glucemia.
Además de la glucosa, muestra las tendencia y velocidad. En forma de diferentes flechas indica si el nivel de azúcar sube, baja o se mantiene estable, permitiendo hacer un estudio de cómo nos afecta cada alimento o ejercicio y teniendo la oportunidad de anticiparse a las subidas y bajadas de glucosa.
También permite la configuración de alarmas y registrar parámetros referidos a bolos de insulina, comidas, enfermedad, ejercicio, etc.
Su principal beneficio es que reduce el riesgo de hipoglucemia y consigue objetivos de HbA1c.
¿Quién puede usarlo?
A diferencia de otros y como anteriormente pasaba, que no estaban permitidos en niños. Esta vez el Dexcom G4 Platinum tiene una línea pediátrica y una adulta, disponible desde los dos años de edad.
¿Por qué no se puede en menores de dos años? yo tampoco sabía perfectamente el por qué y por tanto llamé y pregunté a la compañía que me contestó así: “Es el único equipo en la EU autorizado entre 2 y 7 años. En menores de dos años no está autorizado por que no hay datos para soportar el uso, lo que no quiere decir que no se pueda usar. Sería el llamado uso “off-label” que depende de la responsabilidad que asuman padres y profesionales sanitarios”.
El MCG debe colocarse en el abdomen o en la parte superior del glúteo (solo en niños).
Vivencias
Para mi fue una gran experiencia y lo recomendaría cada día, ya que permite un conocimiento muy profundo de uno mismo. Yo me lo puse porque siempre he tenido una diabetes peculiar, en el sentido en que me afectan mucho las emociones (ya sean alegrías o penas), los periodos hormonales y el deporte. Lo tuve puesto casi dos años, y en ese tiempo obtuve mayor educación diabetológica que en toda mi vida. Sabía qué me afectaba más o menos, cuándo era mejor hora para practicar deporte o en una hipoglucemia como me afectaba la subida de uno u otro alimento.
En el Dexcom lo importante no es la cifra, es la tendencia. Da igual si hay un 250 si la tendencia que lo acompaña refleja que baja a “dos flehas” (muy rápido) porque sabremos que en unos 15 minutos estaremos bien si siguen así.
Las tendencias te ayudan a saber si practicando deporte la glucosa te está subiendo o bajando y saber qué ejercicio es mejor para ti o por ejemplo cómo combinarlo si quieres hacer pesas y aeróbico para no tener ni subidas ni bajadas bruscas. Qué hidratos te sientan mejor, en definitiva me aportó un sin fin de conocimientos sobre mi cuerpo. Cuando hice dos años con él, quise probar a ver si era capaz de llevar el control por mi misma y tras probar que gracias a su uso podía controlarme, ahora lo tengo para utilizarlo si me encuentro en etapas de descontrol, deportes que supongan mucho esfuerzo, viajes especiales, etc, con el fin de seguir manteniendo mi diabetes a raya.
En el caso de Susana Ruíz que os puse la entrevista el otro día, lo usa sobre todo para conocer el índice glucémico de los alimentos, ajustar sus dosis, emplearlo en sus entrenamientos, escapadas o marchas montañeras y así anticiparse a las hipoglucemias y no tener que romper el ritmo.
En el caso de Antonio Lledó, además de por controlar su día a día también lo emplea en sus competiciones, como en la Titan Desert donde le permitió llevar un control perfecto de la glucosa durante este gran reto sin sufrir sustos y además saber qué alimentos le veían mejor que otros para mantenerse.
Especificaciones
Además de lo que se ve, es importante conocer diferentes aspectos del medidor:
El sensor, es el pelo que se mete bajo la piel y que lee las glucosas. Este mide valores entre 40 y 400 mg/dL. Su vida es de 7 días, aunque la mayoría de usuarios los usamos hasta 16 días ya que siguen funcionando de manera óptima y es fácil de volver a calibrarlo sin cambiar el sensor.
El transmisor, es el dispositivo que colocamos encima del sensor para que recoja las lecturas de glucosa y las mande al receptor. Pesa 10 gramos, no hay que recargarlo y garantiza 6 meses de uso.
El receptor, nos muestra la glucosa, las flechas de tendencia y los menús. Tiene una batería de aproximadamente 3 días, en función del uso. Pesa 69 gramos y sus medidas son 10.1 x 4.6 x 1.3 cm.
La pantalla del receptor puede mostrar las lecturas de 1, 3, 6, 12 y 24 horas.
Las lecturas del Dexcom se pueden descargar al ordenador obteniendo gráficas que indican tu tendencia semanal, la relación con el mes anterior, donde sube más o menos la glucosa, etc. Un ejemplo de gráfico que nos deja Susana Ruíz es:
Usar un MCG no significa que vayas a dejar de medir tu glucosa en sangre, ya que necesita dos calibraciones al día. Para ello medimos nuestra glucosa en el dedo e introducimos el valor manualmente en el medidor.
La persona que use anticoagulantes también puede usar el Dexcom.
El paracetamol interfiere en las lecturas del medidor por lo que se aconseja usar alternativas como el ibuprofeno para evitar errores en las lecturas.
El transmisor seguirá leyendo las glucosas hasta a 6 metros de distancia del sensor. Antes era al metro y medio.
Puede usarlo cualquier persona diabética y es apto para usar con la bomba de insulina.
No hay riesgo de infecciones de la zona en la que lo inyectamos.
Tendencias
Para leer las tendencias hay que saber que hay varias variables:
Flecha horizontal: la glucosa se mantiene estable pudiendo subir o bajar a 1 mg/dL por minuto.
Flecha diagonal hacia arriba/abajo: la glucosa sube o baja ligeramente entre 1-2 mg/dL por minuto.
Flecha vertical hacia arriba/abajo: la glucosa sube o baja rápido entre 2-3 mg/dL por minuto.
Dos flechas verticales hacia arriba/abajo: la glucosa sube o baja muy rápido, a más de 3 mg/dL por minuto.
Hay que recordar que son mucho más útiles las tendencias que las cifras porque son ellas las que nos indican lo que ha pasado y lo que va a pasar.
Apósitos
Yo misma he vivido como se despegan en ocasiones los apósitos que aguantan los sensores, pero esto es más una cuestión de la piel de cada uno que del apósito en sí mismo. Sin embargo, existen unas toallitas que se pueden comprar en la farmacia y que aumentan la adherencia del pegamento, son las “Skin-Tak” o también se pueden usar apósitos tipo Op-Site para sujetarlo mejor
Precio
Este es un tema que a todos os preocupa y es normal, al fin y al cabo hay que hacer números. El MCG de Dexcom con su transmisor, receptor y 4 sensores tiene un precio de 1300 euros sin IVA (10%).
Las cajas de sensores de 4 unidades cuestan 340 ?, aunque para un uso continuado suele haber otras opciones. El sistema de pago es a través de cuenta bancaria o tarjeta de crédito. La idea que yo me hice en cuanto al pago, o más bien mis padres, era a cuánto nos salía tener el MCG al día. Si el sensor lo usábamos los días que indicaba la caja era a unos 13 euros diarios y si me duraba unos 14 días cada uno a 6.67 euros diarios con lo que no nos parecía tanto, sabiendo que lo invertíamos en mi diabetes y en mi control.
Otra opción existente es la de suscripción, donde se pagarían 6 cajas a 320 y se recibirían 7 en el plazo de un año. En estos casos si el sensor dura 14 días nos saldría por 5.38 euros IVA incluido.
Actualementa la sanidad pública no los paga, pero esperemos y luchemos porque algún día lo hagan!
Para adquirir el Dexcom se puede hacer a través de la propia empresa Novalab Ibérica, en el correo electrónico info@novalab.es o en el teléfono 918 024 515
Espero que os haya despejado muchas dudas!!! y muchas gracias a Dexcom por ayudarme a despejar algunas dudas que yo también tenía. Si alguno lo usáis por favor, comentad vuestra experiencia :)
Fuente: este post proviene de Vive tu diabetes, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado:
