Tips para preparar proteína como un profesional

Hoy te daremos unos tips para preparar proteína como un profesional. No tienes que preparar cada parte de cada comida por adelantado  para poder lograr tus metas. Con solo enfocarte en la proteína tienes lo necesario

¿Quieres saber de que se trata el físico culturismo realmente?
Te lo diré en una sola palabra: preparación.
Desarrollas un entrenamiento dividido, estructuras tus sets y cuentas tus repeticiones.

Tener un régimen estricto es parte del juego.
No importa si eres un estudiante, un trabajador a tiempo completo o si tienes el físico culturismo como profesión, tu planeas tu agenda para asegurarte de tener tiempo para entrenar, tener tu cardio al día y suficiente descanso.  Y por supuesto, te das cuenta pronto de que tu nutrición debe estar a la misma altura de tus metas.

Tuve esta comprensión cuando era un adolescente gordo y comencé a afilar mi enfoque a la preparación de la comida poco después. Me tomó un largo tiempo perfeccionarlo, pero hoy me siento confiado con respecto a todo lo que hago dentro de la cocina y por qué lo hago.

Quizás no seas un profesional o tengas ningún deseo de convertirte en uno, pero si solo quieres preparar tu proteína de la forma más segura, eficiente y efectiva para lograr tus metas, puedo ayudarte.

Tips para preparar proteína como un profesional

Tienes que hacerlo día tras día
No puedo hablar por ti, pero si de mi experiencia, cambiar mi cuerpo me tomó un esfuerzo serio.

Fui gordo los primeros 13 años de mi vida, y eso no cambió hasta que comencé a pensar en cada bocado que ponía en mi boca.

Empecé a correr y levantar pesas y a verter todo tipo de energías en cada uno de mis entrenamientos con la esperanza de que algún día tendría el cuerpo que siempre había soñado, pero sabía que mi dieta tenía que estar en el punto si quería resultados serios.

Todavía recuerdo estar sentado en clase durante mi segundo año de secundaria casi que a punto de comerme la mano mientras esperaba por la hora de la comida.

Empezó a tener sentido que comenzara a llevar meriendas al colegio: fruta, sándwiches, yogurts, malteadas y cualquier otra cosa que pudiera comer entre clases.

Supongo que dirías que esa fue mi primera experiencia con la preparación de proteínas.

Con el tiempo me fui poniendo más serio con mis entrenamientos, y comencé a sentir una gran necesidad de comidas ricas en proteínas.

Desafortunadamente, almorzar carne estaba lejos de ser una fuente ideal de proteínas, así que los sándwiches se fueron por la ventana.

Comencé a pedirle a mi mamá que me cocinara un poquito más de comida en la cena de forma que pudiera llevarme sobras al colegio al día siguiente.

Eso funcionó bien… por un rato.

Pero eventualmente, comencé a cocinar y preparar mi propia comida.

A lo largo de la universidad se volvió incluso más importante que me preparara mi propia comida con antelación, ya que asaba la mayoría de mi tiempo en clases o trabajando.

En esas dos situaciones habían pocas opciones: Comer o no comer.

La primera opción era cara y se alejaba de la nutrición ideal. La segunda opción también era mala por razones obvias.

Incluso en esa edad, sabía que en el físico culturismo, tienes que comer 100% bien día tras día.

Haciendo mis comidas por antelación era la única forma que podía lograrlo y preparar la proteína como un profesional



Si preparas una sola cosa, haz que sea proteína

Han pasado 16 años y sigo preparando mi comida con anticipación ¿Requiere planeamiento y esfuerzo? Por supuesto.

La preparación de la comida es un fastidio. Pero al igual que todo, con práctica se convierte en algo natural.

Solo aparta unas cuantas horas una vez a la semana y hazlo.

¿Suena como demasiado? Bien.

Solo prepara la proteína. Aún así vas a estar ahorrándote toneladas de tiempo durante la semana.

Aquí está el porqué:

Preparar proteína con antelación significa menos limpieza: Si preparo la proteína una vez a la semana, solo tengo que prender la plancha o parrilla una vez, después solo tengo que ponerlo en recipientes. No podría imaginar hacerlo diariamente.

La proteína toma mucho tiempo para cocinarse: Puedes cocinar algunas cosas en el microondas y otras en una arrocera. Eso no es la gran cosa. Pero incluso los métodos de preparación de proteína más simples toman tiempo y esfuerzo.

Cocinar la proteína ayuda a prevenir su deterioro: Las fuentes de carbohidratos pueden guardarse por bastante tiempo sin que se dañen. La proteína no tanto, por que eso significa que estarás manteniendo granes cantidades de productos crudos en tu refrigerador, a menos que te vayas de compras cada dos días. Ninguno de esas dos alternativas tiene mucho sentido.

Menos comprar, menos cocinar: Generalmente me voy a comprar comida los sábados. Compro 12 libras de muslos de pollo y 14 libras de bacalao fresco. Después me voy a casa y uso la parrilla para el pollo y el horno para el bacalao ¿Por qué? El pollo sabe mejor a la parrilla, y el pescado mantiene su consistencia mejor en el horno. Además, este enfoque ahorra tiempo. Puedo tener la parrilla y el horno prendidos al mismo tiempo y cocinar todo mucho más rápido.

 



La línea de producción de proteína

Preparar el pollo y el bacalao al mismo tiempo toma un poco de planeación, pero aún así tengo mi rutina.

Primero, pongo la parrilla en fuego medio o medio – alto y el horno calentando unos 20 minutos.

Mientras se están calentando, generalmente el pollo termina primero.

Corto el pollo por la mitad y lo abro para que se cocine mejor y más rápido por dentro.

Después, sazono todos los demás muslos con orégano y perejil, y listo.

Trato de no usar sazón prefabricada la mayor parte del tiempo.

Con los años he usado muchísimos de esos, algunos me dan indigestión, mientras que otros son muy aburridos.

No hay nada peor que experimentar una nueva sazón con un montón de comida, solo para darte cuenta después que no te gusta.

Y a nadie le gusta botar basura. Por eso prefiero hacer todo lo más simple posible.

Otra gran ventaja de mantener la comida simple es que tienes más opciones con la sazón después de que  has cocinado.

Con un pollo simple o ligeramente sazonado puedo añadir diferentes sabores, como salsas picantes, bbq o cualquier otra cosa dependiendo del ánimo.

Una vez que el pollo picado y sazonado, pongo los filetes de bacalao en bandejas para hornear.

Manteniendo en mente que voy a ponerlas en recipientes pequeños una vez cocinados, corto los filetes en piezas más pequeñas dependiendo del tamaño de los recipientes.

Al igual que como hice con el pollo, sazono el bacalao con orégano y perejil nada más.

El orégano sabe genial en el pescado, y el perejil, además de verse bien y saber rico, tiene sus propios beneficios saludables.

Una vez que la carne esté lista y el calor esté listo, es hora de cocinar.



Lo que pasa después de cocinar también es importante

Una vez que el pescado y el pollo están listos, los remuevo de la parrilla y el horno y uso diferentes técnicas para drenar los fluidos de los dos mientras se enfrían.

Nota: ¡Lo último que quieres que hacer es poner comida caliente y húmeda en u recipiente! Créeme cuando te digo que se va a volver un desastre baboso una vez que se enfríe.

Además, quieres que tu comida se enfríe antes de ponerla en el refrigerador para evitar elevar la temperatura de tu refrigerador más de lo que debes.

Si puedes mantener una temperatura constante en tu refrigerador toda tu comida durará mucho más antes de dañarse.

Una vez que la comida esté cocinada y refrigerada peso las porciones apropiadas y las divido en recipientes que correspondan a mi ingesta diaria.

O a veces, lo lanzo todo en un recipiente grande y después saco de ahí las porciones diarias necesitadas.

De cualquier manera, el aspecto principal es que la comida sea preparada y guardada para cuando se necesite. Así se debe preparar la proteína.

Preparar la proteína para el éxito

Solía temerle a preparar la proteína. Hoy en día, es más acertado decir que la respeto.

Es una parte vital del proceso, evádela bajo tu propio riesgo.

Se sistemático y podrás salvar tiempo y dinero, sin contar que estarás asegurando tu acceso a las comidas que necesitas.

Aprende de un profesional – a preparar la proteína como uno – y podrás crecer como uno.



Espero que te hayan gustado los Tips para preparar proteína como un profesional, me despido por ahora. Nos leemos muy pronto.

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