Siempre me ha encantado el tenis. Recientemente me ha llamado mucho la atención la repentina caída del Olimpo que está experimentando Rafa. Por eso, quiero compartir contigo el motivo que pienso (es una hipótesis) explica su situación y también su posible solución. Quizás tú también eres un atleta o buscas mejorar tus resultados físicos, así que presta atención.
El problema de Rafa no es que se ha olvidado de jugar al tenis. Lo tiene en su cabeza. Sabe hacerlo como nadie.
Tampoco es culpa del “tío Toni”, puesto que él le ayudó a conquistar 14 grand slams y sabe muy bien cómo hacer su trabajo. Además, es familia y como dice el propio Rafa lo primero es lo primero. Es un tandem ganador como ya han demostrado muchas veces.
El obstáculo tampoco yace en la mentalidad de Rafa. Si algo es admirable en él es su coraje, entrega y disciplina tanto fuera como dentro de la pista de tenis. Siempre he admirado la capacidad de Rafa de levantarse una y otra vez en los momentos más difíciles (tenísticamente hablando). Su tenacidad es a prueba de bombas.
“Ya está, debe ser la edad” estarás pensando. Sí, es verdad que Rafa ya no es un chavalillo a sus 29 años con tanto mundo a sus espaldas, pero la edad tampoco es el problema. Roger Federer tiene 34 y está en plena forma, lo mismo de otros jugadores top-10 como David Ferrer o Wawrinka. Feliciano López acaba de llegar a los cuartos en el US Open a sus 33. Hace 15 años cualquier deportista estaba acabado a los 30, hoy día con la tecnología que hay los atletas pueden durar mucho más. Los estadísticas están ahí.
Bien, te lo voy a decir de una vez. Rafa tiene problemas hormonales (evidentes en su pérdida de cabello) y de intestino (dada su reciente operación de apendicitis). No le faltan piernas, lo que le falta es estómago.
Somos lo que absorbemos
El pasado octubre Rafael Nadal sufrió un principio de apendicitis que los doctores trataron con antibióticos (posible error número 1 por su efecto en la flora). Desconozco los detalles y quizás era la única manera en su fase final. Sin embargo, pienso que se pueden hacer también otras cosas al principio. Rafa estuvo lidiando con su apéndice durante 3 semanas, tiempo de sobra para haber probado con antibióticos naturales de amplio espectro como la alicina (1) o el aceite de orégano (2), ayuno y algún tipo de lavado de estómago, ya que la apendicitis se produce normalmente por infección y/u oclusión mecánica del apéndice.
Pienso que hay que empezar siempre por lo más inocuo para el paciente a largo plazo. ¿Por qué sólo se recetan antibióticos sintéticos cuya impacto es mayor en la flora natural? ¿Por qué no se usan principios activos naturales científicamente probados?
El apéndice es básicamente una reserva de flora intestinal, de bacterias. Si está inflamado es porque hay alteración de la flora, y lo lógico (no lo convencional) en sus fases iniciales sería intentar recuperar ese equilibrio usando probióticos, antibióticos naturales (más “respetuosos” con la flora) y los otros métodos comentados arriba. En lugar de un tratamiento combinado, simplemente se dan antibióticos.
Ni el bazo, ni las anginas (que me quitaron de pequeño, sin anestesia por cierto…), ni la vesícula biliar, ni el apéndice están ahí de casualidad. No digo que en muchos casos la única salida sea extirpar, pero estoy seguro de que en muchas ocasiones se quita el apéndice simplemente porque todavía no se conoce una alternativa mejor. Ya veremos si en 30 años se siguen extirpando…Como siempre digo, si se puede, lo mejor es apoyar el cuerpo (enfoque funcional) no quitarle herramientas de trabajo. Menos mal que a nadie le quitan la cabeza por migrañas.
Después de una apendicitis tu flora intestinal va a estar comprometida de por vida. Sin la flora no digerimos ni absorbemos correctamente los alimentos, y sin ellos el “fuego interno” se va debilitando poco a poco. Cuando somos jóvenes el alimento es digerido bien en el estómago e introducido sin problemas en las células donde las mitocondrias mantienen el metabolismo a un nivel elevado. Dale un pastel a un niño por la noche a ver qué pasa… En cambio, dáselo a una persona mayor y lo que tiene es subida de azúcar (es decir, mitocondrias que no funcionan bien).
Rafa juega con una mano atada a la espalda. No absorbe como debería los alimentos y el resultado es menor energía (pelotas que no llegan al fondo de la pista) y aguante físico (bajones en partidos a 5 sets).
Está claro que Rafa Nadal necesita entonces un programa de por vida para mantener su flora intestinal. Desde kombucha y yogur natural, hasta kefir y probióticos para mantener a sus diezmadas bacterias.
Escuchandole en una de sus últimas entrevistas decía que lo que tiene que hacer es “seguir trabajando…esforzándome en los entrenamientos.” No, lo que tienes que hacer Rafa es mejorar tu dieta y cuidar tu fisiología como hace Novak Djokovich, el número 1 mundial. Él sigue una dieta sin gluten y, estoy casi seguro, que sigue otras pautas nutricionales concretas para sacarle el mayor provecho al Ferrari.
No tengo las fechas exactas, pero estoy casi seguro que podríamos hacer coincidir con mucha precisión la fecha en la que Novak Djokovich empezó a ganar como nunca (antes siempre había sido superado físicamente por Rafa) y el cambio sustancial en su dieta. Recuerdo a Novak con problemas de respiración en partidos…ya no.
El desayuno “perfecto”
Precisamente en la mañana de la última derrota de Nadal en el US Open decían los diarios que Nadal había disfrutado de un desayuno de “pan, jamón ibérico y aceite de oliva” (posible error número 2). Rafa, el pan moderno está cargado de gluten que es una molécula “pegajosa” (en inglés, el pegamiento se dice “glue”). Lo que necesitas son tuberías limpias y con tránsito fluido no cosas pegajosas rondando por ahí. Tu dieta es lo más importante para mantener tu fuerza fisiológica al máximo nivel.
Hormonas y cabello: Sansón y Dalila
Buenas noticias para los que pierden cabello: hay esperanza. También para ti Rafa si sabes hacerlo bien. El pelo es muy sensible a los cambios metabólicos y hormonales. Por eso muchos bebés se quedan prácticamente calvos después del trauma de nacer y muchas mujeres durante la lactancia (que es muy estresante). Es una cuestión epigenética, es decir, un mala adaptación del cuerpo a las circunstancias estresantes del medio ambiente.
El pelo es una unidad fisiológica muy sensible. Principalmente su fuente energética es la glucosa y si el metabolismo de carbohidratos no funciona bien (regulado hormonalmente), el cabello pierde su fuerza (que se lo digan a los que tienen hipotiroidismo). La solución al “flotador veraniego” y a mantener un pelo radiante no pasa por evitar los carbohidratos como muchos piensan (¿dieta cetogénica? no gracias), sino a optimizar el funcionamiento de la célula/mitocondria para que los carbohidratos simples sean oxidados de forma eficiente (y no se queden en la sangre, causando prediabetes). La glucosa es la fuente energética más rápida. ¿Por qué? Porque tú lo vales…
Conclusión
Debes optimizar tus hormonas (prenenolona, DHEA, ratio progesterona/estrógenos, T3), tus niveles de vitaminas B, D, K y A (una zanahoria al día), reducir tu inflamación intestinal y mejorar tus digestiones con probióticos, enzimas y comida fermentada. Evitar el gluten (¡será por falta de información!) y entrenar menos pero de forma más eficiente para no desgastar tus rodillas, ya que tu “marco” es más pesado que el de otros tenistas top-10.
En pocas palabras Rafa, cambia los desayunos de pan por naranjas y podrás llegar a esas bolas con más precisión y fuerza para restar. Si optimizas tu metabolismo, volverás a ser el número uno y ganarás más títulos de Grand Slam. El que tuvo retuvo. ¡Vamos!
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