Los frutos secos además de caracterizarse por tener muy poco contenido en agua, también destacan por ser una excelente fuente de vitaminas, fibra, proteínas vegetales, minerales y ácidos grasos beneficiosos para nuestro organismo, como son los Omega 3. En nuestra alimentación, este tipo de grasas son imprescindibles para que mantengamos un equilibrio saludable de nuestra salud.
Como sabes, existen muchos tipos de frutos secos, puedes encontrarlos en cualquier supermercado o tienda. Su consumo es muy común en la mayoría de las culturas. Aunque, dependiendo del lugar, son más preciados y consumidos unos frutos secos que otros. En las fechas de invierno, podemos encontrar incluso puestos que venden castañas recién calentadas en las brasas del fuego. También, a lo largo del año es común encontrar puestos de almendras y almendras garrapiñadas.
Ya sean: nueces, pistachos, almendras, castañas, anacardos, piñones o avellanas; todos ellos tienen en común que son frutos secos, y gozan de unas propiedades y beneficios para nuestra salud, que sin duda hacen de este alimento uno de los más recomendables, siempre y cuando no exista ningún tipo de intolerancia. Como sabemos muchas personas pueden tener reacciones alérgicas a los frutos secos.
A continuación, veremos en detalle las propiedades de cada fruto seco, ya que cada uno de ellos es beneficioso para nuestra salud y posee unas características particulares…
Las propiedades de los frutos secos y beneficios para tu salud
Si quieres aprovechar todas las vitaminas y minerales de los frutos secos, te aconsejamos que los dejes a remojo entre 8 y 12 horas; de esta manera, contribuyes a una mejor absorción de sus nutrientes, lo que te ayuda también a tener una mejor digestión.
Según los estudios realizados, comer frutos secos es especialmente beneficioso para que protejamos nuestro sistema cardiovascular. Gracias a sus ácidos grasos Omega 3, también son un excelente recurso para mejorar el funcionamiento de nuestro sistema nervioso. Todos ellos contienen cantidades valiosas de vitamina E, por lo que también tienen propiedades antioxidantes.
Gracias a su gran aporte calórico y el valor nutricional del que hacen gala, son un alimento fundamental y más que recomendable para los deportistas, y para cualquier persona que realice esfuerzos físicos de manera prolongada.
A continuación te detallaremos las propiedades de algunos de los frutos secos más importantes, especificaremos cuáles son sus características, y en qué te benefician para tu salud:
Pistachos
Los pistachos están especialmente recomendados para combatir el cansancio y la fatiga. Son, además, muy beneficiosos para las personas que padecen de insomnio, ya que les ayudan a dormir mejor, gracias a que favorecen el descanso.
Su aporte de potasio es la gran baza de este fruto seco, ya que contiene hasta un 70% de nuestras necesidades diarias recomendadas. Está considerado como electrolito, lo que le confiere unos beneficios extraordinarios para una correcta transmisión nerviosa, facilitando la contracción de los músculos y regulando la presión arterial.
Otra característica destacable de los pistachos es que son beneficiosos también para nuestro sistema inmunológico, ayudándonos así a combatir infecciones y a tener un mejor estado de salud general.
Almendras
Las almendras también son muy recomendables para personas con un desgaste físico o mental continuado. Se consideran un alimento imprescindible en cualquier etapa de nuestras vidas. Gracias a su rico contenido en fibra es especialmente recomendable para personas con estreñimiento, ayudándoles a que puedan ir al baño con regularidad.
Este fruto seco se caracteriza sobre todo por ayudarnos desde dentro a que mantengamos una piel y cabello saludable, manteniéndolo en unas buenas condiciones. Destaca por sus nutrientes y alto valor nutricional ya que además de fibra y proteínas vegetales, contiene vitamina E, vitamina B2, fósforo y magnesio.
Avellanas
Las avellanas destacan por ser un estimulante de la memoria, teniendo así un efecto positivo en el rendimiento intelectual. También, tienen una participación activa en la formación de glóbulos blancos, que son los encargados de protegernos ante los patógenos que nos ocasionan diversas infecciones.
La avellana es un alimento especialmente importante para las mujeres que están embarazadas, ya que favorece la salud durante el embarazo y la lactancia, debido a su alto contenido en vitamina B9 o ácido fólico. También ayudan a reducir los dolores del Síndrome premenstrual (SPM).
Nueces
Las nueces son sin duda uno de los frutos secos estrella por excelencia, ya que es apreciado y consumido en todo el mundo, gozando de una gran popularidad. Gracias a que son una gran fuente de vitamina E tiene acción antioxidante en nuestro organismo, de esta manera nos ayuda a retrasar el envejecimiento protegiéndonos del daño que ocasionan los radicales libres.
Las nueces están consideradas como el medicamento más natural para el corazón, esto es debido a su gran aporte en ácidos grasos omega 3, que nos ayuda a controlar el colesterol y la presión arterial alta en sangre. El estudio Predimed (Prevención con Dieta mediterránea) recomendó una dieta basada en nueces para reducir la inflamación y el nivel de lípidos en sangre. Se trata de una excelente opción para combatir cualquiera de las enfermedades que están asociadas al sistema cardiovascular.
Anacardos
Los anacardos o también llamados castañas de cajú, se caracterizan por ser uno de los mejores alimentos para prevenir la diabetes tipo II. Parece ser que esto es debido a su elevada cantidad de magnesio, que ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre. Poseen también funciones antioxidantes gracias a su aporte de vitamina E.
Es uno de los alimentos más rico en cobre, facilitando la absorción del hierro en los alimentos y reduciendo los niveles de colesterol en sangre, entre otros muchos beneficios.
Hemos visto algunos de los frutos secos más recomendables, sin embargo, existe una gran variedad. Todos ellos repercuten positivamente en nuestra salud y son recomendables en una dieta equilibrada. Consumir estos alimentos regularmente nos proporciona energía y grasas saludables que nos ayudan a combatir las grasas saturadas y perjudiciales para nuestro organismo.
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Fuente: este post proviene de Crear Salud, donde puedes consultar el contenido original.
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