Por qué no quiero hacer mi propio protector solar en casa

De antemano adelanto que me ha costado mucho escribir este post en el que te cuento porqué no quiero hacer mi protector solar en casa. A todos nos gusta caer bien y sé que decir ciertas cosas va a provocar comentarios y opiniones que no estarán de acuerdo con lo que voy a explicar.   Pero este es un tema que me quema en las manos desde hace mucho tiempo.  

Antes de empezar quiero decir que este post es una reflexión en voz alta sobre un tema que me parece muy importante, y que para mí está directamente relacionado con la salud.   También antes de comenzar pido disculpas si alguien se siente molesto por mis opiniones, no es mi intención dejar en mal lugar a nadie y todo lo que escribo no es una crítica a nadie.  Como digo es simplemente poner por escrito algo que llevo años reflexionando y que ahora he documentado por si a alguien le puede servir de ayuda. Y por último ten en cuenta que no soy dermatologa, ni médico, ni farmacéutica, ni química, ni bióloga. Para hacer este artículo me he informado,  he leído libros y distintos artículos, y al final tienes enlaces y las reseñas de los libros donde puedes ampliar la información que yo explico aquí. Si en algo me he equivocado, lo lamento porque he querido ser lo más rigurosa posible.

Empiezo diciendo que hago todos mis productos de cosmética en casa y el único que no hago es el protector solar.  Soy una apasionada y fiel defensora de la cosmética natural casera, creo que la naturaleza nos brinda ingredientes maravillosos que cuidan con mucho amor nuestra piel. Si me sigues hace tiempo ya lo sabrás.

Pero para mí el tema de la protección solar tiene que ver directamente con la salud, es decir, evitar un cáncer de piel. Hacer un protector solar casero no tiene nada que ver con hacer un cosmético casero porque no tiene la misma finalidad, el protector solar te protege de una enfermedad que puede ser mortal, un cosmético casero su finalidad puede ser cuidar la piel, hidratar, nutrirla, y todo lo que ya sabes.  Aquí está la gran diferencia.



¿QUÉ LE PIDO YO A UN PROTECTOR SOLAR?

Es fácil, que me proteja del sol.  Y concretando, me tiene que proteger de los rayos UVA y UVB. El sol altera nuestra piel y la culpa es de las radiaciones ultravioletas A y B, y también de los rayos infrarrojos que emite la luz solar.  Hoy se sabe que los rayos UVA y UVB pueden provocar cáncer de piel.  Los rayos UVA son de onda larga y, por tanto, penetran profundamente en la piel hasta llegar a la dermis. No sólo producen cáncer sino que dañan el colágeno y aumentan el envejecimiento.

Los rayos UVB tienen una longitud de onda corta, penetran en la epidermis de manera más superficial pero se quedan ahí y son la principal causa de cáncer de piel.  Son los responsables de que nuestra piel se ponga como un cangrejo y nos quememos.

Y ahora lo importante, puedes no quemarte pero no esto no significa que los rayos UVA no te estén provocando daños en la piel, lo que pasa es que tú no lo ves.  Aquí está el problema.

¿CÓMO PUEDO SABER SI UN PROTECTOR SOLAR ME PROTEGE DEL SOL?

Para empezar tienes que conocer el FACTOR DE PROTECCION SOLAR o más conocido como  “FPS”.  Esto es básico.  Si miras cualquier crema de protección solar verás que aparece indicado el FPS.

¿Y qué es el FPS?  Como indican las siglas es el Factor de Protección Solar, es un factor que determina lo efectivo que es un protector solar frente a los rayos UVB. Si tu piel desprotegida tarda 10 minutos en ponerse roja, con un factor de protección FPS 15 tendrás aproximadamente dos horas y media de protección solar (FPS 15 x 10 min = 150 minutos).

¿Y qué pasa con los rayos UVA? El protector solar también tiene que protegerte de estos rayos, ya te he dicho que no ves sus efectos porque son invisibles, pero acaban provocando un cáncer de piel si no te proteges correctamente.  En la Unión Europea los envases tienen que llevar un círculo con el distintivo UVA, pero esto depende de las legislaciones de cada país.  En la foto puedes ver el FPS y el circulito que indica protección contra rayos UVA.



Hay otra manera de medir el FPS y se basa en la potencia de la fórmula: el FPS 15 bloquea entre un 93 y 95% de los rayos UVB; y el FPS 50 bloquea un 98% de los rayos UVB (hay una escala).  Esto también sirve de ayuda para diferenciar un factor de protección de otro.

Si ves incluso el protector solar con FPS 50 no bloquea al 100%, eso quiere decir que tu piel todavía absorbe algo de UVB.

Pero además tienes que tener en cuenta otras variables:

. la cantidad de crema que te pones en la piel.  La proporción adecuada es 2 miligramos de crema por centímetro cuadrado de superficie de piel.  En general solo nos ponemos entre 0,5 y 1 miligramos por centímetro cuadrado.

. una parte de la crema desaparece con el sudor, el roce de la ropa o al bañarse en el mar. Esto quiere decir que no sirve con darse la crema cuando vas a la playa y olvidarte para el resto del día.

. estar debajo de la sombrilla tampoco sirve de nada porque la acción de los rayos UVA persisten hasta un 50%. Lo mismo sucede si está nublado.   Para que te hagas una idea, los rayos UVA traspasan los cristales del coche o de un avión.

. estar en el agua tampoco te protege del sol. Al contrario la capacidad reflectora del agua eleva la radiación entre un 50% y un 90%. Y los rayos UVA llegan a una profundidad de 50 cm.

Si quieres saber más sobre cómo funciona una crema solar te dejo este artículo de Dimetilsulfuro.

Visto todo esto para mí es importante tener la certeza de que mi protector solar cumple los requisitos que mi piel necesita.

Y queda otro detalle importante. Las pruebas del FPS.    Cuando se elabora un protector solar antes de sacarlo a la venta deberá someterse a extensas pruebas in vitro e in vivo. Es decir se prueba en personas voluntarias que se exponen a una cantidad específica de luz solar. Los resultados son evaluados en un laboratorio y se comprueba que el FPS es el correcto.



QUE SE UTILIZA EN COSMÉTICA CASERA PARA HACER UN PROTECTOR SOLAR

Por una parte existen los filtros minerales que se obtienen de la pulverización de dos minerales: dióxido de titanio y óxido de zinc. Protegen frente a los rayos UVB y UVA. Son los que emplean las empresas de cosmética ecológica.  No absorben apenas o incluso nada las radiaciones ultravioletas y hacen de pantalla reflectora. No tienen ningún efecto hormonal y no causan alergias. En función del porcentaje que se añada a la crema se obtiene un nivel de FPS u otro.

Por otra parte se atribuyen capacidades de protección solar a determinados aceites vegetales y mantecas.  Es probable que hayas oído hablar del aceite de semilla de frambuesa, aceite de semilla de zanahoria, el aceite de coco y la manteca de karité.

¿SOY CAPAZ DE HACER MI PROTECTOR SOLAR EN CASA?

¿Soy capaz de determinar el FPS de mi protector solar casero?  Para mí la respuesta es no.  Por el siguiente motivo: mi cocina no es un laboratorio.

Ojo, yo no digo que tu no seas capaz de hacerlo en tu casa, solo digo que yo no me veo capaz.

La cuestión no es que no me crea que el óxido de cinc y el dióxido de titanio tienen un factor de protección que sí que lo tienen porque lo utilizan las empresas de cosmética ecológica para elaborar los protectores solares,  el problema es el siguiente:

El óxido de cinc es un ingrediente difícil de manipular en casa.  Y por difícil de manipular me refiero a que es difícil conseguir que se mantenga la dispersión de este ingrediente dentro de la mezcla porque es una partícula que tiende a formar grumos. Con lo cual si el óxido de cinc no se distribuye uniformemente es imposible que la crema solar pueda ofrecerte una protección adecuada porque por unas zonas tendrá más óxido de cinc y por otras menos.

Puedes ver un artículo muy revelador en la web Realize Beauty donde Amanda Foxon-Hill (cosmetologa química) explica como intentó hacer su propio protector solar en casa y para asegurarse del factor de protección llevó sus pruebas a un laboratorio y pago 700$ y con tristeza descubrió que  la mayoría tenían un FPS entre 7 y 8 cuando ella lo formuló para un FPS de un 30/40.  Al cabo de dos años y de multitud de pruebas y gracias al uso de material de laboratorio como homogeneizador, mezclador de hélice, protocolo de prueba de estabilidad, microscopio y una gran inversión en pruebas FPS (en individuos) consiguió obtener un FPS de 40.

Pero además Amanda Foxon-Hill descubrió que al agregar a la mezcla emulsionantes, activos y conservantes se alteraba el FPS. Con lo cual también tuvo que tenerlo en cuenta para obtener el Factor de Protección Solar estable y correcto.

Mi reflexión:  en casa me parece muy difícil determinar si realmente estamos haciendo un protector solar con un factor de protección exacto 30 ó 40 ó 50, porque la eficacia del óxido de titanio no sólo depende de la cantidad que le pongas sino de cómo se distribuya el ingrediente en la emulsión, y de las interacciones con otros activos.   Y esto es fundamental, si yo no tengo la absoluta certeza de que mi protector solar me protege contra un cáncer de piel no lo voy a hacer en casa.

Además yo no voy a poder a hacer las pruebas correspondientes en individuos para poder evaluar si realmente el FPS que yo creo que tengo en mi crema es realmente el adecuado.  Y sinceramente mi piel y la de mi familia no la voy a usar como voluntarios humanos.



ES POSIBLE QUE ME DIGAS

“Los aceites vegetales y algunas mantecas son unos maravillosos protectores solares.  Yo los utilizo y no me he quemado. “ Entonces vuelvo a lo que te he dicho antes.  Que no te hayas quemado no quiere decir que los rayos UVA no te estén produciendo un daño irreparable porque sus daños son invisibles y a largo plazo. No te avisan y cuando te das cuenta es demasiado tarde.

Tal vez me digas, “bueno, entonces yo me hago mi crema con Oxido de Cinc y aunque no tengo muy claro el factor FPS le añado todos los aceites vegetales y todas las mantecas que dicen que tienen protector solar y ya está.”  Pues tampoco te lo recomiendo. En el caso de mezclar distintos factores de protección no sumas, sino que el FPS del total será el del ingrediente que lo tenga más elevado.

Respecto al tema de los aceites vegetales con protección solar te recomiendo que leas este artículo de la web Fórmula Botánica, son una escuela muy reconocida de Cosmética Orgánica donde su directora  Lorraine Dallmeier es bióloga y científica medioambiental. Esta escuela tiene actualmente 4000 alumnos distribuidos en más de 100 países.  En este artículo que te recomiendo explican que :

.” Los investigadores en un estudio (Gause y Chauhan, 2016) encontraron que los aceites naturales no son adecuados para bloquear los rayos UV.”

. “Los aceites naturales no absorben UV en las longitudes de onda correctas. En el estudio de Gause & Chauhan mencionado anteriormente, la vitamina E era la única sustancia que mostraba una absorbancia UV apreciable, pero esto solo ocurría por debajo de una longitud de onda de 310nm”

. “Los aceites botánicos naturales no han pasado por el laboratorio y se requieren pruebas humanas para establecer su FPS.    El protector solar se prueba  en voluntarios humanos que están expuestos a una cantidad específica de luz solar. Su reacción de la piel es evaluada. El laboratorio luego compara estos resultados con los resultados de sus pruebas para asegurar que el FPS coincida.”

También es posible que me digas que la industria cosmética y farmacéutica sólo busca argumentos para  demonizar la cosmética natural y meternos miedo en el cuerpo.  Yo en este caso en concreto no lo creo.  Pero aunque así fuera te digo que sin tener la certeza clara de que puedo fabricar mi propio protector solar sabiendo que tiene un FPS adecuado no lo voy a hacer nunca.  No me arriesgo, aprecio demasiado mi vida y la de mi familia.  Porque si una aceite vegetal con propiedades antiedad lo utilizo y no funciona lo único que me puede pasar es que me salgan arrugas en la cara, pero no supone un riesgo para mi salud.

CONCLUSION

Para protegerme del sol yo utilizo protectores solares con certificación ecológica con FPS 50.  Además voy a la playa antes de las 10 de la mañana y a partir de las 7 de la tarde.  Siempre utilizo crema solar (aunque solo vaya a pasear a la playa), y llevo gorro y gafas de sol.  Renuevo mi crema cada hora y si me meto en el agua también.  Si salgo a la montaña hago lo mismo, siempre crema solar y siempre protegida por gorro y gafas de sol. Sigo el mismo procedimiento.

Ahora en el mercado hay muchos protectores solares con certificación ecológica, a mí me merece la pena comprarlos porque yo no lo considero un gasto sino una inversión en mi salud y la de mi familia.

Si no sabes qué protector solar comprar comparto contigo estos dos artículos de una revista digital experta en cosmética natural ORGANICS MAGAZINE y que el año pasado dedicó un artículo a los protectores solares ecológicos , y otro artículo muy interesante de protectores solares para bebés.

Espero haberte ayudado, y repito que estoy siempre del lado de la cosmética natural y casera. No es mi intención tampoco incitarte a comprar ninguna marca de protector solar. Solo me mueve un afán de información.  Y si en algo me he equivocado pido disculpas, me he informado y he leído muchos artículos, pero no soy dermatóloga, ni médico, ni cosmetóloga, ni bióloga, ni química.

MÁS INFORMACION

En los artículos de webs encontrarás más enlaces donde podrás ampliar la información.

Artículo de Realize Beauty sobre el óxido de cinc.

Artículo de Fórmula Botánica sobre los aceites vegetales con protección solar

Normativa Unión Europea y publicada en el BOE (Boletín Oficial del Estado en España)

Libro “Cuestión de Piel” de Dra. Yael Adler

Libro “Cosmética Slow” de Julien Kaibeck

Artículo de Dimetilsulfuro sobre los filtros solares

Artículo de Dimetilsulfuro sobre filtros solares

Artículo de Humblebeeandme sobre hacer protectores solares en casa

Artículo de OCU (Organización de Consumidores España)  información sobre la caducidad de las cremas solares

Artículo de OCU sobre las cremas solares

Artículo de ASOCIACION ESPAÑOLA CONTRA EL CANCER sobre como evitar un cancer de piel.

Artículo de SKIN CARE FOUNDATION sobre la protección solar

Libro “Secretos de belleza coreanos” de Charlotte Cho donde tiene un capitulo dedicado a la protección solar.

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Un abrazo muy natural.

Yolanda